Cuando tu sueño es dedicarte a la cocina, no hay mayor reconocimiento al esfuerzo y el trabajo bien hecho que el de obtener una estrella Michelin. Hay a quienes les llega después de muchos años de dedicación a este maravilloso oficio y para quienes es casi un "llegar y besar el santo".
Abrirte camino en el mundo de la gastronomía entre los más veteranos y laureados chefs no es un camino fácil, aunque el esfuerzo y el tesón siempre dan sus frutos.
Hay quienes la juventud la asocian a la falta de experiencia, pero también están quienes ven en ella una virtud, la fuerza, la inocencia y la energía de alguien recién llegado. Y todo eso -y mucho talento- es lo que se necesita para, con tan solo 24 años, tener una estrella Michelin en tu poder.
Desde que en noviembre de 2019 Javier Serrano abriese las puertas del restaurante que lleva su nombre en Mirando de Ebro, ni el joven ha parado de aprender y mejorar ni su restaurante posicionarse cada vez mejor.
Con tan solo 24, el joven chef ya atesora una estrella Michelin y un Sol de la Guía Repsol, los reconocimientos de las guías de referencia en la gastronomía.
El mar de Castilla
Según el propio chef, "nos gusta hablar del mar de Castilla porque ese es nuestro referente. Trabajamos el mar porque entendemos lo local no solo por lo que tenemos más cerca, sino por lo que somos capaces de traer a la mesa".
Técnicas de otros países, pescados de nuestras costas, verduras de proximidad... todo englobado bajo el concepto de El Bosque Marino con el que el joven chef ha conquistado a los paladares más exquisitos.
Con este concepto, Alejandro ofrece dos opciones de menú degustación, uno de nueve pasos por un precio de 90€ sin bebida, y otro de 12 pasos por 110€, donde tampoco está incluida la bebida.
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