¿Cuántas veces hemos visto en las películas americanas esas tortitas esponjosas para desayunar? Siempre soñábamos con ellas. Es cierto que en España ese no es el desayuno más común, pero de vez en cuando, esta delicia hace que el día empiece mucho mejor de lo previsto.
Sin embargo, cuando nos lanzamos a los fogones y nos ponemos con la receta, algo falla. No nos quedan igual. En las películas —o restaurantes— son tortitas o ‘pancakes’ super esponjosos y en nuestra casa nos quedan completamente flácidas, sin ese toque que les hace únicas. Pero puedes estar tranquilo porque el truco para conseguir que parezcan tortitas recién salidas de una cocina estadounidense no puede ser más simple.
El truco para hacer ‘pancakes’ muy esponjosos: dejar en reposo la masa
Seguro que has escuchado eso de “las cosas de palacio van despacio”, refiriéndose a que hay que hacer todo con más calma, con tiempo, para que salga bien. Pues con las tortitas americanas ocurre lo mismo.
Si preparamos la masa y acto seguido las empezamos a hacer en la sartén, los ingredientes no se habrán integrado correctamente entre sí, y, la levadura química —ingrediente responsable de la esponjosidad de la tortita— no habrá podido apenas hacer efecto en la masa, quedando como resultado unos ‘pancakes’ flácidos que apenas tengan grosor.
Por eso, el truco definitivo para hacer una tortita completamente de película de Hollywood, es dejar reposar la masa unas cuantas horas antes de cocinarlas en una sartén antiadherente. Y si es posible dejar la masa preparada la noche anterior a hacerlas, muchísimo mejor. Tan solo tienes que conservarla en el frigorífico y no habrá ningún problema.
Ingredientes para hacer tortitas americanas muy esponjosas
- 1 huevo
- 125ml de leche
- 100gr de harina
- 8gr de levadura química
- 20gr de azúcar
- 15gr de mantequilla
Con estas cantidades salen —aproximadamente— unas 8 tortitas.
Elaboración de unos ‘pancakes’ de película
- Derretimos la mantequilla en el microondas con cuidado de que no se queme.
- Batimos el huevo y le añadimos los ingredientes líquidos (leche y mantequilla derretida). Mezclamos muy bien para que se integren entre sí.
- En un bol aparte tamizamos la harina para evitar que se formen grumos y seguidamente, le echamos y mezclamos los ingredientes secos (azúcar y levadura química).
- Después, juntamos los secos con los líquidos y batimos muy bien hasta que quede una masa homogénea, que dejaremos reposar en la nevera durante toda la noche.
- Al día siguiente, sacamos la masa del frigorífico para que se atempere. Mientras, cogemos una sartén o plancha antiadherente y la calentamos a temperatura media.
- Cuando llegue a la temperatura, vertemos —con ayuda de un cazo— un poco de la masa sobre la sartén, y cuando veamos que le salen burbujitas, le damos la vuelta y la dejamos unos 2 minutos hasta sacarlas a un plato. Esas burbujas son la señal de que la tortita ya está hecha por abajo y hay que darle la vuelta para que no se queme.
- Cuando tengamos todas las tortitas hechas, tan solo tendremos que acompañarlas con nuestros ‘toppings’ preferidos: chocolate derretido, miel, sirope de arce, nata montada, mermelada, fruta, etc. Lo que quieras, porque sea lo que sea, te habrán quedado unas tortitas americanas de cine. ¡A disfrutarlas!
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