El río Monachil es muy corto, apenas 25 kilómetros desde que nace a los pies del pico Veleta hasta que desemboca junto a Granada. Pero los paisajes que va dejando a su paso son una maravilla. Esta ruta discurre a su lado y nos va presentando cómo el río ha ido esculpiendo la roca hasta crear un profundo cañón. Puentes colgantes, escaleras, pasarelas y miradores se van alternando durante los poco más de nueve kilómetros de este sendero bien señalizado. De hecho, hay varias opciones y muchas son circulares.
El cañón del río Monachil conforma una de las rutas de senderismo más atractivas, sencillas y populares de la provincia de Granada
La ruta parte desde el mismo pueblo de Monachil, situado a 14 kilómetros de Granada. Es una de las más bonitas de la provincia, pero también de las más populares, por lo que está bien acondicionada, incluso con parking para que dejes el coche.
Con el sonido del río
El sendero discurre junto al río y los meses de otoño el paisaje es una auténtica maravilla. El sonido del agua te acompañará hasta la primera parada, la central hidroeléctrica de la Trola. Estuvo en funcionamiento hasta los años 60 y de aquí se generaba la energía que utilizan los tranvías de la ciudad. Ahora hay unos paneles informativos sobre el edificio y también sobre la ruta y las especies que la habitan.
El sendero discurre junto al río y los meses de otoño el paisaje es una auténtica maravilla
Poco después llegamos al primero de los puentes colgantes de la ruta. Los primeros son cortos para ir entrenando hasta llegar al más espectacular. La gran atracción del día tiene 63 metros de largo para que cruces el río a unos 15 metros de altura.
Toca agarrarse
Y agacharse y demostrar no que se está en forma sino que se es ágil. Y es que llegamos a la parte más estrecha del cañón, donde impresionan lo altas y juntas que están las paredes y también lo estrechito que se vuelve el camino. Eso sí, hay zonas para agarrarse a la roca y no terminar en el río.
La palabra cahorro se utiliza en Granada para referirse a un paso estrecho por el interior de un valle
Por si todavía no lo sabías, cahorro es un paso estrecho en el interior de un valle. Se trata de una palabra que se utiliza en Granada y también en las vecinas Almería y Málaga y que podríamos “traducir” como cañón. Al final de esta parte destaca la cueva de las Palomas, creada por el propio río al ir escarbando la roca.
Coger altura
Toca separarse un poco del río y subir un poco, lo que permite llegar a un paisaje diferente, menos verde, pero con unas vistas panorámicas de gran parte del valle. Tras cruzar el Puente de las Chorreras, toca regresar por el otro lado del río. Un camino algo más “tranquilo”. Y esta es solo una de las rutas que te ofrece esta zona de la sierra granadina. Es sí, puede que sea la más especial. Más información sobre esta ruta en turgranada.es
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