No solo en España se vive con intensidad y pasión la Semana Santa. En otros destinos del mundo también estas fechas son motivo de celebraciones únicas y se convierten en lugares donde vivir experiencias únicas y auténticas.
Cracovia (Polonia)
Polonia ha pasado de ser un destino afectado por la invasión rusa de Ucrania a beneficiarse en cierta medida del conflicto de Oriente Próximo por atraer a un gran volumen de turistas religiosos que, ante la incertidumbre que generan la situación en Tierra Santa, optan por peregrinar al país que vio nacer a San Juan Pablo II, el Papa Wojtyla. Para seguir sus huellas la primera parada es la ciudad de Wadowice, su lugar de nacimiento, pero el destino principal será la ciudad de Cracovia, de la que fue arzobispo.
Imprescindible en Cracovia visitar la Plaza del Mercado (la plaza medieval más grande de Europa), la Basílica de Santa María, la Lonja de los Paños y el Castillo de Wawel
Imprescindible visitar la Plaza del Mercado en el casco antiguo (la plaza medieval más grande de Europa), la Basílica de Santa María, donde Wojtyla fue sacerdote de 1952 a 1957, la Lonja de los Paños, la Universidad Jagiellonian, donde se pueden admirar recuerdos de Nicolás Copérnico, y el Castillo de Wawel, con su catedral llena de recuerdos relacionados con la historia de Polonia. Otro lugar de interés es Kazimierz, el antiguo barrio judío, una de las zonas más populares de la ciudad gracias a su ambiente. Aquí se encontraba el gueto judío durante la II Guerra Mundial y donde Steven Spielberg filmó escenas de “La lista de Schindler”.
Roma (Italia)
La capital de Italia se convierte en la capital del mundo en Semana Santa, en el epicentro de la religiosidad cristiana. Misticismo y sobriedad se combinan con la belleza y los atractivos tanto de la Ciudad Eterna como de la Ciudad del Vaticano. Tanto si se es religioso como si no, son experiencias imprescindibles el Vía Crucis del Viernes Santo en el Coliseo o la bendición Utbi et Orbi que el Papa ofrece el Domingo de Pascua en la Plaza de San Pedro a feligreses llegados de todo el mundo.
La bendición Utbi et Orbi que el Papa ofrece el Domingo de Pascua en la Plaza de San Pedro congrega a feligreses llegados de todo el mundo
En el apartado gastronómico, en Semana Santa se pueden degustar algunas especialidades propias de esas fechas, como la pizza de Pascua, que a pesar de su nombre no es una pizza al uso sino un dulce tradicional que se come en la mañana del día de Pascua y se suele acompañar de huevos duros o de embutido como la corallina.
Isla de Malta
La Semana Santa es una de las mejores épocas del año para visitar la joya del Mediterráneo que es la isla de Malta debido a que los numerosos estudiantes extranjeros que recibe la isla toman vacaciones y sus calles, atracciones y restaurantes están más accesibles. En este pequeño país que cuenta con 365 iglesias, una para cada día del año, la Semana Santa se vive con especial fervor entre su población, que participa de forma muy activa en todas las celebraciones. El viernes anterior al Domingo de Ramos los feligreses procesionan la estatua de La Piedad por las calles de la capital, La Valeta, y el Domingo de Ramos marca el comienzo oficial de la Semana Santa.
En este pequeño país que cuenta con 365 iglesias, una para cada día del año, la Semana Santa se vive con especial fervor entre su población
El acto más multitudinario es la procesión del Viernes Santo, uno de los días más importantes del año en Malta. Esta procesión se celebra en múltiples ciudades del archipiélago, pero la más famosa es la de Mosta. Además de la capital, La Valeta, merecen una visita la ciudad medieval de Mdina, en el interior, y Senglea, conocida como "La Invicta" debido a su historia de valientes defensas. Entre sus joyas arquitectónicas destacan el Fuerte de San Miguel y las majestuosas murallas que abrazan la ciudad. Desde el jardín Gardjola no hay que perderse las vistas panorámicas del Gran Puerto.
Estambul (Turquía)
Aunque se trate de un país de religión musulmana, hay una pequeña comunidad católica turca que celebra la Semana Santa. La pintoresca y colorida iglesia de San Antonio de Padua, ubicada en el bullicioso barrio de Taksim, es la construcción católica más importante de Estambul. Su fachada de ladrillo rojo y estilo neogótico veneciano contrasta con las cientos de mezquitas repartidas por la ciudad. Es en esta pequeña iglesia donde los devotos pueden asistir a misa en distintos idiomas (turco, polaco, italiano e inglés) y participar de los actos religiosos propios de estos días.
La iglesia de San Antonio de Padua, ubicada en el bullicioso barrio de Taksim, es la construcción católica más importante de Estambul
Además del atractivo que tiene vivir la Semana Santa en un país musulmán, Estambul ofrece multitud de atractivos ya que es una ciudad única en el mundo, ubicada entre dos continentes. Santa Sofía, la Mezquita Azul, el Palacio Topkapi, el Gran Bazar, la Cisterna Basílica, la plaza Taksim y la avenida Istiklal son básicos de Estambul. Y no hay que dejar la ciudad sin realizar un mini crucero por el estrecho del Bósforo.
Manila y Palawan (Filipinas)
Formado por más de siete mil pequeñas islas, el archipiélago de Filipinas alberga algunos de los paraísos naturales más bellos del planeta y una diversidad de recursos naturales sorprendentes, desde cristalinas aguas turquesas a frondosas montañas cubiertas por un manto vegetal, como las terrazas de arroz de Batad, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
El archipiélago de Filipinas alberga algunos de los paraísos naturales más bellos del planeta y una diversidad de recursos naturales sorprendentes
En sus hermosos pueblos y ciudades se vive intensamente la Semana Santa. La catedral de Manila, la capital, es lugar de peregrinación, y en las calles de San Pedro Cutud, un pequeño pueblo de la provincia de Pampanga, algunos feligreses procesionan descalzos el Viernes Santo llevando su penitencia hasta el límite. Las islas de la provincia de Palawan son las más reconocidas como destino viajero por su combinación de playas, paisajes marinos, bosques pluviales vírgenes y resorts de primera categoría.
Formosa (Argentina)
Ubicada en la zona noreste de Argentina, la provincia de Formosa es una joya natural y cultural por descubrir. Alberga el tercer humedal más grande de América y la Reserva de la Biosfera Laguna Oca, única en el mundo por su gran biodiversidad. Los primeros navegantes españoles bautizaron a Formosa como “Vuelta Fermosa”, que significa “vuelta hermosa”. Si por todo esto ya sobran motivos para conocer esta provincia, hay mas aún en Semana Santa ya que aquí se lleva a cabo el Vía Crucis más largo del mundo, certificado así por el Libro Guinness de los Récords.
En la provincia argentina de Formosa se lleva a cabo el Vía Crucis más largo del mundo, que discurre a lo largo de 501 kilómetros por la Ruta Nacional 81
Este Vía Crucis se realiza a lo largo de 501 kilómetros sobre la Ruta Nacional 81, que atraviesa toda la provincia. Comienza en la capital provincial, Formosa, y termina en Línea Barilari, donde se encuentra el Parque del Vía Crucis. A lo largo del recorrido hay catorce cruces de madera realizadas en quebracho y algarrobo, especies forestales de la zona. Cada cruz del recorrido evoca algún episodio particular de la historia de esta provincia y se rinde homenaje a los nativos, los inmigrantes y los misioneros con mensajes basados en la espiritualidad.
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