En un rincón de los Montes de Toledo, inmerso en el Parque Nacional de Cabañeros, nos encontramos con un paisaje espectacular marcado por el agua: el Chorro de Los Navalucillos. Esta espectacular cascada se alza hasta los 20 metros de altura y podremos llegar hasta ella a través de una increíble ruta de senderismo entre las montañas.
La ruta hasta el Chorro de Los Navalucillos
El Chorro de Los Navalucillos es uno de los enclaves naturales más bonitos de la provincia de Toledo. Para llegar hasta el lugar, tendremos que completar una interesante ruta, apta para todos los niveles, que inicia en la zona conocida como Las Becerras, aproximadamente a 10 km del pueblo de Los Navalucillos. Más concretamente, la empezaremos junto a la caseta de información situada en el límite del Parque Nacional, donde hay aparcamientos para dejar el coche.
La ruta transcurre por la zona más montañosa del Parque Nacional de Cabañeros, lo que nos permite disfrutar de los paisajes más bellos, de frondosos bosques mediterráneos y de varios saltos de agua. El primer tramo del recorrido nos conduce por una espesa masa forestal, con especies como las encinas y las jaras. Al llegar al arroyo de la Arañosa, pasaremos a un bosque de ribera con fresnos, sauces, arraclanes, arces y castaños.
Si miramos hacia el cielo, nos solo podremos aprecias las crestas de las montañas de los Montes de Toledo, sino también el vuelo de algunas aves como los buitres leonados. Es ahora cuando atravesamos el arroyo del Chorro y empezamos a caminar entre helechos, brezos, enebros, mostajos, acebos y abedules. Después de una hora de recorrido, llegaremos a una pequeña explanada.
Desde aquí tomaremos una senda señalizada por la que ascendemos hasta llegar al desvío a la cascada, donde se encuentran los restos de un antiguo refugio de cabreros. Por fin, nuestros ojos se posarán en las estruendosas aguas del Chorro de Los Navalucillos, que caen desde los 20 metros de altura. Aquí no tendremos más que despejar la mente y disfrutar de la tranquilidad de este paisaje.
Si aún nos quedamos con ganas de descubrir más maravillas de este Parque Nacional, podemos alargar un poco más la ruta y llegar hasta la Chorrera Chica cogiendo otro camino en el anterior desvío. Por otra parte, los más aventureros también podrán atreverse con la ascensión hasta el Rocigalgo, el pico más alto de los Montes de Toledo, con 1.448 metros. Desde allí, las vistas del entorno son simplemente espectaculares.
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