El castillo de Girona que Salvador Dalí regaló a su mujer

En un pequeño pueblo del corazón de Girona, se alza una valiosa construcción: el Castillo Gala Dalí de Púbol. Ya con ese nombre adivinamos que hay alguna relación entre el edificio y el artista, y efectivamente el pintor catalán adquirió el castillo en la década en los 60 para regalárselo a su mujer Gala. A día de hoy, este se ha convertido en todo un museo, donde también descansan en paz los restos de su amada.

Una atmosfera romántica

En 1969, Salvador Dalí compró el castillo medieval, una fortificación del siglo XIV-XV, con un objetivo claro en mente: crear un lugar perfecto para su esposa Gala. En un principio, el edificio estaba muy deteriorado, con los techos hundidos, grandes grietas y un jardín prácticamente salvaje. Sin embargo, el pinto no trató de ocultar el paso del tiempo en la estructura, sino que quiso mantener la atmosfera romántica que eso le confería.

Sala del Piano del Castillo Gala Dalí de Púbol.

El ingenio del matrimonio hizo que el resultado fuese un edifico único, con un diseño que utilizaba las paredes y las cubiertas semiderruidas para crear espacios de lo más peculiares. Entre las habitaciones más destacadas están la antigua cocina reconvertida en sala de baño o el Salón del Piano. Asimismo, en cuanto a la decoración interior Dalí uso representaciones pictóricas en los muros, antigüedades, telas... dando como resultado un lugar misterioso a la vez que bello.

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El último taller de Dalí

Con el paso del tiempo, el castillo se trasformó en el último taller de Salvador Dalí y, posteriormente, en el lugar de descanso de Gala, cuyos restos siguen allí en un mausoleo diseñado por su propio esposo. Ya en 1996, el edificio fue abierto al público, dando la oportunidad de descubrir este íntimo universo creado por el pintor.

Actualmente, los visitantes pueden ver las pinturas y dibujos que Dalí regaló a Gala, además de esculturas de elefantes de patas largas en el jardín y una colección de vestidos de alta costura. Junto a este castillo, se pueden visitar otro dos importantes puntos relacionados con el artista en la provincia de Girona: Portlligat y Figueres. Así, junto a Púbol forman el conocido como Triángulo Daliniano.