El peligro de compartir tus recorridos cuando haces deporte en las redes sociales: la Guardia Civil explica por qué es una mala idea

Con la llegada de septiembre, son muchos los que se suman al 'running'.
Con la llegada de septiembre, son muchos los que se suman al 'running'.
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Con la llegada de septiembre, son muchos los que se suman al 'running'.

Una de las tendencias que hay en Internet entre los denominados 'runners' es la de compartir los recorridos que hacen cuando practican deporte, pero esta acción tan inocente puede poner en riesgo nuestra seguridad.

Dar a conocer a través de las redes sociales la ubicación exacta implica una serie de riesgos. Esto se debe a la geolocalización, que consiste en la obtención de la ubicación de un objeto, como podría ser un teléfono móvil, una calle o un coche.

Desde la Oficina de Seguridad del Internauta aseguran que para obtener la ubicación exacta se utiliza un sistema de posicionamiento gracias a una tecnología formada por una red de satélites que dan cobertura en toda la Tierra.

Es necesario conectar el dispositivo a tres satélites para saber dónde está, por consiguiente, se recibirá un identificador y el teléfono se encargará de calcular el tiempo que tarda en llegar. Además, se obtendrá la ubicación gracias al retardo.

A pesar de esto, la geolocalización tiene sus inconvenientes, pero también sus ventajas, ya que ayuda a mejorar la eficacia en algunos aspectos de nuestra vida. Si no dispusiéramos de ella, algunas tareas como encontrar la ruta más corta, no serían tan sencillas.

Cuando publicamos nuestra ubicación en las redes sociales, sin ser conscientes, estamos dando permiso a una app para acceder a nuestra ubicación y, por lo tanto, se facilita datos personales sobre algunos de nuestros hábitos diarios.

La Guardia Civil alertaba en su cuenta oficial de Twitter sobre los peligros que tiene compartir la ruta que seguimos cuando hacemos deporte y los riesgos que implican en nuestra seguridad.

Riesgos de la geolocalización

El riesgo principal es la información comprometida que queda expuesta en Internet. Esta acción es peligrosa porque los ciberdelincuentes utilizan herramientas para encontrar objetivos basándose en las publicaciones en redes o la información facilitada por mapas virtuales .

Hay que ser conscientes de los riesgos sobre compartir nuestra ubicación. Por ejemplo, si publicamos todos los días la ruta que hacemos, cualquier persona con acceso a nuestro perfil podría saber dónde estaremos y a qué hora en un futuro.

Añadir la ubicación a un post pone en riesgo a los usuarios, asimismo, está en nuestras mano cuidar la privacidad sobre lo que publicamos y los permisos que condecemos a las aplicaciones que instalamos en nuestro móvil.

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