Shamima, la 'novia del ISIS' que quiere volver a casa: litiga por recuperar la ciudadanía que Reino Unido le quitó por sus nexos terroristas

Se llama Shamima Begum. En 2015, cuando aún era una colegiala de la Bethnal Green Academy, apenas 15 años, cambió el Reino Unido por Siria para unirse al autodenominado Estado Islámico, llamado también DAESH. Huyó de su hogar en Londres para convertirse en una "esposa de combatientes". Hoy, siete años después, quiere volver.

Su historia comienza el 18 de febrero de 2015. En medio del avance del Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS), Shamima tomó un vuelo junto a dos amigas en el aeropuerto londinense de Gatwick con destino a Estambul (Turquía). Los pasajes los pagaron con lo que sacaron de las joyas que habían robado a sus familias.

Desaparecieron. Sólo se supo de su viaje por las imágenes de una cámara de seguridad del aeropuerto y de una terminal de buses en Turquía. Las tres habían cruzado la frontera hacia Siria y llegaron a los territorios del DAESH. Allí se casaron con yihadistas extranjeros.

El periodista Richard Kerbaj afirma en un libro que se ha publicado este 2022 que Begum y sus amigas fueron llevadas a Siria por Mohammed Al-Rashed, un hombre que trabajaba como informante para los servicios de seguridad de Canadá. Esta persona habría dirigido la parte turca de una extensa red de tráfico de personas para el ISIS.

En un campo de detenidos yijadistas

Pasó el tiempo. De sus amigas algo se supo, pero no de Shamima. Hasta que al final de la guerra siria, un periodista de The Times, Anthony Lloyd, la encontró en un campo de detenidos yijadistas controlado por los kurdos. Echaba de menos a su marido, un holandés que también estaba detenido pero en otro lugar. Una semana después, Begum perdió a su tercer hijo.

El Ministerio del Interior británico revocó su ciudadanía por motivos de seguridad nacional. En ese momento se planteó la posibilidad de ganar la nacionalidad de Bangladesh, lugar de origen de su padre, pero este país se negó. Sin embargo, lo que más ha cambiado en este tiempo -o eso parece- ha sido la propia joven, que hoy tiene 22 años.

Vine a Siria no por razones violentas ... En ese momento no sabía que el Isis era un culto a la muerte, pensé que era una comunidad islámica a la que me unía"

"La razón por la que vine a Siria no fue por razones violentas ... En ese momento no sabía que ISIS era un culto a la muerte, pensé que era una comunidad islámica a la que me unía", dijo Shamima en 2021 en una entrevista del programa Good Morning Britain, de la ITV. Contó que llegó a Siria esperando simplemente casarse, tener hijos y "vivir una vida pura e islámica".

Sus sentimientos y deseos son otros. Ella es otra; acaso ha vuelto a ser la que fue. Sin burka pero con maquillaje, sin corán pero con vaqueros, quiere regresar a Reino Unido. El asunto está en los tribunales, pero Begum vive todavía en un campamento en Siria, país del que no puede salir porque no tiene nacionalidad alguna.

Shamima, la apátrida

La Corte Suprema británica dictaminó en 2021 que la joven no tiene permitido regresar al país para luchar legalmente por su residencia. Hoy en día Shamima Begum es una apátrida.

Sé que es difícil que los británicos me perdonen porque han vivido con miedo al Isis y han perdido a seres queridos por ello, pero yo también he vivido con miedo al Isis"

"Sé que es muy difícil para los británicos tratar de perdonarme porque han vivido con miedo al ISIS y han perdido a seres queridos por su causa, pero yo también he vivido con miedo al ISIS y también perdimos seres queridos a causa del ISIS, así que puedo simpatizar con ellos de esa manera", dijo el año pasado.

Más suerte están teniendo las mujeres españolas vinculadas con milicianos de Estado Islámico y sus hijos que permanecen en los campos para desplazados en el noreste de Siria. El Gobierno las va a repatriar en las próximas semanas.

Y eso que contra las cuatro mujeres -tres ya son viudas- pesa desde septiembre de 2019 una orden internacional de detención dictada por la Audiencia Nacional. El Ejecutivo español quiere traer de vuelta a tres mujeres españolas, así como una marroquí casada con un español y a su hijos, al menos 16 menores. 

España sí va a repatriar a cuatro mujeres vinculadas al Estado Islámico y a 16 niños que están aún en campos en Siria

Pero desde el 10 de Downing Street se muestran muy reacios a repatriar a sus nacionales. La ONG inglesa Reprieve, dedicada a defender de forma gratuita a condenados a pena de muerte, calcula que entre 20 y 25 familias británicas, incluidos 36 niños, siguen en los campos del noreste de Siria.

Apelación ante Inmigración

Ahora en Londres se ha iniciado un proceso para la posible revisión del caso. Este lunes, en ausencia de Shamima Bedum, se celebró una audiencia ante la SIAC, la comisión especial de apelaciones sobre inmigración. Los abogados alegan que su clienta fue víctima de la trata de seres humanos.

Este caso es el de una niña que fue manipulada por la maquinaria del ISIS"

"Este caso se refiere a una niña británica de 15 años que fue manipulada junto con sus amigas por la maquinaria de propaganda del ISIS, que resultó eficaz para ser entregada en matrimonio a un combatiente", ha dicho una de sus abogados. Otro propone que se determine si cuando Interior le quitó la nacionalidad tuvo en cuenta que la chica fue víctima de trata de personas.

Para el Gobierno británico esa no es la cuestión: no se trata de tráfico de personas sino de la "seguridad nacional". El abogado del Ministerio del Interior argumenta que Begum "viajó, se integró y permaneció en Siria durante cuatro años" y que en realidad sólo abandonó el territorio controlado por el ISIS por motivos de seguridad "y no por una desvinculación real del grupo".

Acusada de colaborar con terroristas

El problema de Shamima Bedum es que, además, se le acusa de estar involucrada en actividades terroristas. Según The Daily Telegraph, la mujer era una "ejecutora" de la "policía moral" del DAESH y, de hecho, trató de reclutar a otras mujeres jóvenes para el grupo.

Un activista contra el DAESH asegura que Begum ayudó a coser chalecos explosivos al cuerpo de terroristas suicidas

Otro diario, The Independent, cita a un activista antiyihadista que asegura que Begum ayudó a coser chalecos explosivos al cuerpo de terroristas suicidas y que éstos "no podían ser retirados sin detonar". Esta fuente mantiene que hay varias denuncias en ese sentido.

Preguntada por ello en la entrevista de la ITV de 2021, la joven dijo: "Estoy dispuesta a ir a los tribunales y enfrentarme a las personas que hicieron estas afirmaciones y refutarlas, porque sé que no hice nada en el Estado Islámico más que ser madre y esposa".

No hice nada en el Estado Islámico más que ser madre y esposa"

Mucho han cambiado sus puntos de vista respecto a 2017. Aquel año, 22 personas murieron y más de mil resultaron heridas después de que un terrorista detonara una bomba en un concierto de Ariana Grande en el Manchester Arena.

Cuando en 2019 fue localizada por un periodista de la BBC, afirmó de aquel atentado que estaba mal matar a personas inocentes, pero que el autodenominado Estado Islámico lo justificaba como represalia por el bombardeo que la coalición (la creada por Estados Unidos) había llevado a cabo sobre áreas controladas por el ISIS.