Barcelona

Entra en vigor la limitación de las reuniones a un máximo de diez personas en Cataluña

Dos chicas en la terraza de un bar de Castelldefels (Barcelona).
ACN - Archivo

Las medidas anunciadas este lunes por la Generalitat para frenar la transmisión del coronavirus en Cataluña, que incluyen limitar a diez personas los encuentros y reuniones sociales, están en vigor desde este jueves, tras recibir el aval del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) y una vez publicadas en el Diari Oficial de la Generalitat de Catalunya (Dogc).

La resolución publicada en el Dogc recoge también que todas las actividades deberán finalizar como máximo a las 00.30 horas y que deberá garantizarse que cada persona dispone de un mínimo de 2,5 metros cuadrados.

También recomiendan -aunque no imponen- limitar el acceso a espacios públicos donde se puedan producir concentraciones de personas entre las 0.30 horas y las 6.00, como parques y playas. Mientras, el Govern espera a que la justicia avale el toque de queda de 1:00 a 6:00 horas para 158 municipios catalanes que el 'president' Pere Aragonès ha anunciado este miércoles.

Asimismo, entra en vigor la prohibición de consumir bebida y comida en grupo en el espacio público.

La nueva resolución también prohíbe bailar en espectáculos y celebraciones permitidas, como fiestas populares y banquetes, "por el especial riego que se asocia a esta actividad al no permitir la distancia mínima de seguridad"; tampoco se puede bailar en el exterior de bares musicales y discotecas -en el interior, la actividad está prohibida-.

Las fiestas populares y tradicionales se pueden celebrar tanto al aire libre, en un espacio perimetrado, como en espacios cerrados, siempre que se cumplan los aforos máximos y las condiciones de ventilación y control de acceso, y con los asistentes sentados.

Las medidas entran en vigor este jueves y perdurarán hasta las 00:00 horas del viernes 23 de julio, cuando serán revisadas.

Transmisión comunitaria del virus

En la resolución, la Generalitat justifica las medidas por la necesidad de evitar aglomeraciones y contactos entre personas que no conviven, limitar la interacción social y "prescindir de aquellas actividades no esenciales que supongan un riesgo de contagio".

Todo ello se produce "en un contexto de transmisión comunitaria creciente, no controlada y sostenida en todas las regiones sanitarias", según un informe de la Agència de Salut Pública de Catalunya en el que se basan las nuevas restricciones.

Los datos sitúan a Cataluña "claramente en un contexto de quinta ola pandémica y justifican, sin demora, una revisión al alza de las medidas restrictivas" para revertir la curva ascendente de contagios ante el avance de la variante delta, que representa el 40% de los contagios en el territorio, según la resolución.