Jean-Paul Gaultier ha vuelto a visitar el plató de El Hormiguero y junto a Pablo Motos ha presentado su nueva creación revolucionaria: Fashion Freak Show. El diseñador, retirado desde hace 14 años de las pasarelas, vuelve a la escena de España con un musical teatralizado donde destaca la moda, el canallismo, la vanguardia y la rebeldía freak. Un estilo que, a sus 71 años, Gaultier se niega a dar la espalda y con el que quiere contar la historia de su vida, el mundo interior que siempre ha imperado en él y la visión estilística que tantas críticas ha tenido en ocasiones.
Conocido como el enfant terrible (niño terrible), Jean-Paul Gaultier nunca se ha conformado con la moda clásica. "Siempre viví la moda como lo que es, un gran y maravilloso teatro", dijo en la presentación del show que aterrizará el próximo 4 de abril en el Teatro Coliseum de Barcelona. El show nace desde las ganas de que las personas empiecen a divertirse y hacer una espectáculo de moda como nunca antes había hecho. Dejar la pasarela para llegar a las tablas y plasmar muchas de las inspiraciones, como fue su abuela, y de las que ha bebido el diseñador durante su vida. Pero también de antiguas y nuevas figuras icónicas desde Rossy de Palma hasta Rosalía.
Qué es la moda 'freak' de Jean-Paul Gaultier
"En la tierra de dioses y monstruos, yo era un ángel que vivía en el jardín del mal", canta Lana del Rey en su canción Gods and Monsters. Una frase que podría ser representativa de la vida de Jean-Paul Gaultier, el diseñador pionero en subir a la pasarela la diversidad de cuerpos, los géneros fluidos y las razas. Él hizo de los desfiles, la puerta de la alta costura al libertinaje. Gaultier ve en el corsé femenino la armadura del empoderamiento de la mujer, mientras que descubre en el torso desnudo del hombre la fragilidad. En ambos descubre a través de la moda una galaxia de expresiones estilísticas desde el amor y la sexualidad propia y no del gusto para los demás. "Si las mujeres se vestían para ser sexys, yo quería que los hombres fueran vestidos para lo mismo", ha contado a Pablo Motos.
En este espectáculo volverá a presentar su visión como modista desde un lado freak, circense, cabaretero, androgénico y humorístico donde habrá una cifra de 300 trajes, según ha contado en El Hormiguero. Adquiere ese relato de persona fuera de los patrones establecidos, provocativa con aquella otra parte de la alta costura que se aleja de lo raro, distinto y extravagante. Así pues, el diseñador presenta ahora un show artístico con estética que recuerda a un Moulin Rouge de la nueva era y que tendrá entre sus protagonistas a su amiga Rossy de Palma, uno de los iconos de nuestro cine y nuestra moda.
Por qué Rossy de Palma es una de sus musas
Rossy de Palma y Jean-Paul Gaultier han tenido una relación profesional y personal durante muchos años, tanto que le lleva a decir a Pablo Motos que es la mujer más elegante que conoce. La actriz española es toda una 'chica Almodóvar', pero se puede decir que también es un icono para el diseñador francés. De Palma ha destacado siempre en el mundo de las artes donde ha colaborado en diverso desfiles, donde Gaultier siempre se ha rendido a su estilo y personalidad extravagante. Es por ello que la considera toda una musa y por la que no ha podido falta en su Fashion Freak Show.
Personaje de la teatralidad y la originalidad, Rossy de Palma suele optar por prendas y accesorios llamativos, colores brillantes, estampados atrevidos y siluetas poco convencionales. Además, su estilo refleja una actitud de confianza y libertad para experimentar con la moda, combinando piezas de alta costura con elementos más informales o incluso kitsch. Todo esto es lo que le lleva a convertirse también en una 'chica Gaultier'.
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