Kourtney Kardashian y Travis Barker se dieron el 'sí, quiero' tres veces a lo largo de 2022. En abril de ese año, la pareja se casó en una boda falsa en Las Vegas, en la que la pareja no obtuvo la licencia de matrimonio. Un mes después, el 15 de mayo, decidieron por fin legalizar su matrimonio en un juzgado de Santa Bárbara. Ese mismo fin de semana, Kourtney, Travis y sus amigos más cercanos viajaron a Italia para celebrar una boda íntima y llena de lujos.
Aún no se ha cumplido el primer aniversario de esta última boda, celebrada a lo grande en Portofino. Pero la Kardashian ha querido adelantarse y compartir con sus seguidores en redes sociales cómo fue el proceso de diseño del vestido de novia que lució aquel día. La pieza fue diseñada por la firma Dolce & Gabbana y está llena de detalles y referencias que la 'celebrity' ha querido compartir.
El vestido nupcial que Kortney diseñó junto a Dolce & Gabbana era un rompedor diseño corto, ajustado, en forma de corsé y con tirantes en raso y encaje. Estaba acompañado por un larguísimo velo, con flores bordadas a mano inspiradas en los jardines mediterráneos de la ciudad costera y una imagen de la Virgen María. La novia lució además guantes de tul blancos y stilettos de encaje en el mismo color.
Un videoclip de Guns N' Roses
En el pie de foto de este carrusel, Kourtney ha contado que su primera inspiración para el diseño de su vestido de boda fue el videoclip de 1991 de Guns N' Roses, 'November Rain'. Según cuenta la 'celebrity', Travis y ella vieron este video la noche antes de comprometerse. En él, aparecía un vestido de novia corto y la Kardashian se enamoró perdidamente de él. "Nos dijimos 'esta tiene que ser nuestra boda'", dice Kourtney de la noche previa a su compromiso.
Además de estas referencias, el vestido corto de Kourtney también se inspiró en una campaña de los años 90 de Monica Bellucci para Blumarine. En estas imágenes, la modelo llevaba un vestido de novia corto con un corsé ajustado y telas transparentes, un diseño que tiene cierto parecido con el que luego eligió la Kardashian para dar el 'sí, quiero'.
Una boda furtiva en Italia
La localización fue una de las mayores influencias para la boda. Kourtney y Travis viajaron junto a sus invitados hasta Portofino, un encantador y lujoso pueblo pesquero ubicado en la costa de la Riviera Italiana, al sudeste de Génova. Sus casas de colores pastel, las boutiques de lujo, las marisquerías y los yates de ricos y famosos convierten a este lugar en una de las localidades costeras más exclusivas de Europa.
Aunque la boda y el vestido estuvieron planeados hasta el último detalle, Kourtney quería que reinase una sensación de espontaneidad. "Cuando supimos que nuestra boda sería en Portofino, también influyó en la 'vibra' y el sentimiento del vestido. ¡También quería sentir que nos escapábamos a Italia para casarnos y quería que el vestido y la boda se sintieran de esa manera!", explicaba la Kardashian en su publicación.
Un tatuaje de la Virgen María en la cabeza
Durante la ceremonia, la 'celebrity' llevó un largo velo de encaje que escondía el detalle más especial del diseño. Por sugerencia de los diseñadores de Dolce & Gabbana, Kortney decidió llevar bordado en su velo una imagen de la Virgen María, concretamente el diseño que su esposo, Travis Barker, lleva tatuado en la parte superior de su cabeza. Cuando los diseñadores le dieron la idea, la Kardashian reconoció que sintió "escalofríos" y que supo que sería un detalle de lo más especial.
Debajo del dibujo de la Virgen, este velo hecho a mano también incluía las palabras "familia, lealtad y respeto", también por uno de los tatuajes de su pareja.
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