¿Tienes la costumbre de echarte un poco de perfume o colonia antes de salir de casa? Si lo tienes cogido como rutina, estás en el camino correcto. El olor que desprendemos y trasmitimos a los demás es más importante de lo que nos imaginamos, porque además de ser sinónimo de higiene, es algo que define nuestra personalidad. Existen multitud de firmas en España con este tipo de productos a la venta, tanto de bajo coste como de lujo, pero, ¿cuál es la diferencia entre ellos?. Vamos a averiguarlo.
Diferencias entre colonia y perfume (y fragancia)
La colonia y el perfume son productos obtenidos mediante elaboraciones diferentes, mientras que la fragancia es una derivación de estos dos. Por ello, cuando hablamos de fragancia, nos referimos al olor o aroma que inhalamos y percibimos por el sentido del olfato. Lo podemos obtener gracias a los perfumes y las colonias, claro está, pero también a través de algunos elementos de la naturaleza, como las flores y las plantas, y por productos que consumimos a diario, como los alimentos. Todo olor que somos capaces de percibir significa fragancia.
Ahora que ya hemos entendido lo que es una fragancia, ¿cuál es el matiz que diferencia un perfume de una colonia? ¿Será la fragancia que trasmiten? No es el principal aspecto diferencial porque una colonia y un perfume pueden desprender el mismo aroma. La diferencia básica está en el nivel de concentración.
El perfume se entiende como la sustancia o el resultado de una mezcla de compuestos, normalmente en estado líquido, que produce una fragancia muy característica y atractiva. Están elaborados a partir de aceites esenciales y compuestos aromáticos, y dispone de una concentración bastante alta, alcanzando hasta el 30% del total del producto.
Sin embargo, la colonia, o también denominado como agua de colonia, es una sustancia muy similar al perfume, pero con un matiz diferencial, y es que la colonia contiene un nivel de concentración en aceite esencial bastante inferior al del perfume. Por esa misma razón, el perfume tiene mayor duración que la colonia, porque mientras uno consta de un 30% de aceite esencial en su composición, el otro contiene únicamente un 8%.
También podemos encontrar algunas diferencias entre ambas en cuanto a la intensidad, la estacionalidad, y el precio. Los perfumes son muchos más intensos que las colonias porque son más puros y concentrados, y mientras uno es más frecuente usarlo en invierno, el otro es mejor usarlo en verano. Con relación al tema del precio, si hacemos una comparativa, los perfumes suelen ser más costosos que las colonias.
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