Por qué deberíamos enfocar nuestra rutina según la fase de nuestro ciclo menstrual

Cuando tenemos la regla, el estrógeno y la progesterona se liberan en momentos específicos, dando lugar a variaciones en el equilibrio hormonal. Esto afecta en nuestro día a día. Aprendemos a identificar cada fase. 

Niveles de energía según nuestra fase del ciclo.
Niveles de energía según nuestra fase del ciclo.
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Niveles de energía según nuestra fase del ciclo.

Los expertos en España siempre insisten en la importancia de estar activo, a nivel físico y mental. Sin embargo, a lo largo del ciclo menstrual, las hormonas sexuales, estrógeno y progesterona, se liberan en momentos específicos, dando lugar a variaciones en el equilibrio hormonal

Esto influye en diversos sistemas del cuerpo, como la digestión, la inmunidad, la salud de la piel, el metabolismo y la energía. Es precisamente esta influencia la que causa fluctuaciones notables en los niveles de energía y productividad de las mujeres, dependiendo de la fase específica en la que se encuentren dentro de su ciclo menstrual.

Niveles de energía durante las fases del ciclo menstrual

Los ejercicios de fuerza ayudan a quemar calorías de manera más rápida.
Los ejercicios de fuerza ayudan a quemar calorías de manera más rápida.
M.O.

"Se observa que los niveles de estrógenos están relacionados con los niveles de energía. En las fases del ciclo menstrual que tenemos más estrógenos, nos sentimos con más energía y vitalidad. Es por esta razón, que en la menopausia, donde se produce una disminución significativa de los niveles de estrógenos, las mujeres sienten más cansancio", explican desde el equipo de expertos de DOMMA. 

Los expertos explican que, dependiente de la fase del periodo en la que nos encontremos, nuestro cuerpo responderá de una manera. 

  • Fase menstrual: Se produce una disminución de los estrógenos y la progesterona. Esto puede provocar una caída del estado de ánimo, de la energía y de la productividad.
  • Fase folicular: Se produce un aumento de los estrógenos, esto va acompañado de un aumento de la energía y de la productividad.​
  • ​Fase ovulatoria: Los estrógenos están en su punto más alto, es por esto que es cuando se tiene una sensación de más energía.
  • Fase lútea: Las hormonas sexuales fluctúan y empiezan a bajar. Predomina la progesterona y disminuyen los niveles de estrógenos. A causa de estas fluctuaciones se suelen tener cambios de humor.

¿Cómo podríamos adaptar nuestras actividades diarias?

Conocer nuestro ciclo menstrual, saber en qué etapa nos encontramos, y de esta manera adaptar nuestras actividades diarias es imprescindible para garantizar un bienestar físico y mental. Los expertos nos dan algunas sugerencias, que son:

  • Fase menstrual: escucha tu cuerpo y permítete descansar. Se recomiendan ejercicios de baja intensidad como caminatas, yoga o natación. Este tipo de actividades ayudan a aliviar las molestias menstruales, promueven la relajación y son suaves para el cuerpo durante este periodo.
  • Fase folicular: céntrate en actividades que requieran mayor concentración y esfuerzo físico.​ Se recomiendan ejercicios de resistencia, de intensidad moderada. En esta fase se produce un aumento de la energía y resistencia en esta fase y esto permite realizar actividades más intensas. Ejemplos de actividades podrían ser correr o levantamiento de pesas.
  • ​Fase ovulatoria: el pico de estrógenos y con el pico de energía se sugiere aprovechar esta fase para realizar actividades intensas y sociales, optimizando el rendimiento físico y mental. El pico de energía y de fuerza en esta fase son claves y es muy beneficioso aprovecharlo para realizar actividades que requieran esfuerzo intenso, ejercicios de alta intensidad como entrenamientos de alta intensidad (HIIT), spinning o clases de cardio.
  • ​Fase lútea: caracterizada por la fatiga y los cambios de humor, se recomienda practicar autocuidado, escucharse y cubrir las necesidades de cada una. Se sugiere realizar ejercicio moderado como caminatas rápidas o entrenamiento de fuerza. Esto es debido a que se suelen experimentar cambios de energía y síntomas premenstruales que pueden limitar.

¿Y cómo afecta cuando llega la menopausia?

En la menopausia también es importante conocerse y adaptar las actividades diarias para gestionar la fatiga, adaptarse a los cambios en el sueño y abordar los cambios emocionales: "Muchas veces, es necesario incorporar suplementos para equilibrar los niveles hormonales y hacer esta etapa más llevadera", explican. 

Realizar actividad física durante la menopausia puede ser beneficioso para la salud general y, además, puede ayudar a aliviar algunos síntomas comunes de la menopausia como sofocos, sudores nocturnos, cambios de humor: "Son muy recomendables los ejercicios aeróbicos de baja intensidad, entrenamientos de fuerza, yoga y entrenamientos de movilidad y flexibilidad", sentencian. 

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