Por qué tus cremas y tratamientos estéticos no tienen el resultado que esperas

Las cremas antiarrugas son ideales para prevenir la aparición de las líneas prematuras.
Una buena rutina cosmética es fundamental pero no debemos quedarnos solo ahí.
Freepik
Las cremas antiarrugas son ideales para prevenir la aparición de las líneas prematuras.
Gema Cabañero

Gema Cabañero

  • Directora de I+I+D de 180 the Concept nutricosmética avanzada

Cada vez más un mayor número de personas son conscientes de la importancia que tiene cuidar de su cuerpo, rostro y bienestar. Lejos de ser una cuestión frívola, el mimarse a través de tratamientos estéticos o productos cosméticos se convierte en una cuestión de salud. Ayuda a despejar y relajar la mente, además de aportar unos beneficios estéticos personalizados.

Sin embargo, y aunque la intención sea la de relajarse, a través de ellos también se busca conseguir unos objetivos concretos en el físico. En relación a esto, muchas veces, los clientes salen muy satisfechos, pero, en un breve periodo de tiempo, vuelven a exigir esos resultados que consiguieron en la sesión y que ahora ya no tienen. Lo mismo sucede con las rutinas de cosméticos que, aunque pueden conseguir beneficios al principio, luego ven estancado su progreso.

Factores que influyen en el resultado de los tratamientos estéticos

La respuesta al porqué sucede esto no es nueva y es que, desde el nacimiento de la medicina en la Grecia de Hipócrates, el equilibrio nutricional y el bienestar emocional han sido considerados clave para mantener un buen estado de salud y belleza.

La nutrición es un factor determinante, ya que las vitaminas y nutrientes que se aporta al cuerpo pueden favorecer a retrasar el proceso del envejecimiento. Hablamos así de casos de tratamientos estético faciales con efecto flash que rápidamente pierden su resultado debido a que el organismo no sintetiza de forma correcta el colágeno por falta de minerales y proteína.

Del mismo modo, no tener un descanso ni sueño reparador o estar viviendo en un continuo estado anímico de estrés y ansiedad puede afectar al tono de la piel y a no lograr los resultados que esperamos. Este factor está directamente relacionado con el cortisol alto, que puede tener consecuencias como una mala absorción de los alimentos, indigestión o ralentización del metabolismo que favorece la acumulación de grasa, impidiendo que avancemos, por ejemplo, en una dieta de adelgazamiento.

Por otro lado, el no dormir bien también impide que logremos buenos efectos con nuestros cosméticos, ya que la noche es el momento en el cual se produce la regeneración celular y se renuevan las fibras de colágeno y elastina.

¿Cómo mejorar el resultado de los tratamientos estéticos?

Para lograr unos resultados duraderos y óptimos en el tiempo, lo principal es saber aquello de lo cual el organismo tiene necesidad o aquellos hábitos que necesita modificar para que aproveche las bondades que se le aportan.

Para ello, un diagnóstico integral es imprescindible. A través de él, el profesional podrá conocer los déficits vitamínicos que se sufre y, a través de una dieta personalizada, ayudar a reactivar procesos que tu organismo no realiza correctamente por falta de nutrientes. En estos casos, los suplementos vitamínicos y nutricosméticos, sobre todo al principio, pueden ser de gran ayuda.

Algunas de las vitaminas reconocidas por su efecto positivo en el organismo son:

Vitamina C y E: con alto poder antioxidante que reduce los radicales libres producidos por el estrés.

Oligoelementos y minerales como el magnesio, zinc, selenio, calcio, hierro o cobre que ayudan a estimular la producción de colágeno de manera correcta.

•Vitaminas como B1, B2, B3, B5, B6, B7 y B9 que estimulan la creación de queratina y favorecen la nutrición de los tejidos.

¿Quieres recibir gratis todos los jueves en tu correo los mejores contenidos de belleza, moda y estilo de vida? Apúntate a nuestra Newsletter.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento