La llegada de los coches eléctricos e híbridos a España y resto del mundo han provocado un sinfín de reacciones y comportamientos que, en un primer momento, no se esperaban en la población. El excesivo precio de estos vehículos, problemas con el aparcamiento o los escasos puntos de recarga, entre otros, son algunos de los factores que hacen que sean inaccesibles este tipo de automóviles para la gran mayoría de los ciudadanos.
Asimismo, y tal y como hemos mencionado líneas atrás, también existen problemas de comportamiento y de conducta entre los conductores de coches de combustión que perjudican de forma importante a los usuarios de automóviles híbridos y eléctricos.
¿Existen aparcamientos para todo el mundo?
Desde hace un tiempo, existe una Ley que regula y controla el número total de plazas de aparcamiento que deben de reservarse en todas las ciudades para el uso, único y exclusivo, de los coches eléctricos e híbridos que suelen ser estacionados en las calles.
En condiciones normales, este tipo de plazas deberían ser utilizadas para recargar los vehículos eléctricos e híbridos durante un tiempo limitado. No obstante, en la actualidad se ha puesto en práctica una técnica llamada 'icing' que afecta directamente a los distintos usuarios que son dueños de automóviles de última generación.
¿Qué es el 'icing'?
El 'icing' es el nombre que han otorgado en Estados Unidos y Canadá al comportamiento y actitud de los propietarios de coches con motor de combustión, es decir, diésel o gasolina, que estacionan su vehículo en las plazas reservadas para los automóviles híbridos y eléctricos.
En la actualidad, el Reglamento General de Conductores, concretamente la señal R-308, prohibe estacionar en este tipo de plazas a todos los vehículos que no sean eléctricos o tengan relación con los automóviles de nueva generación, excepto en algunos casos que, a continuación, explicaremos detalladamente.
¿Qué vehículos pueden aparcar en estas plazas?
Tal y como hemos indicado, existen excepciones para aparcar en esta zona reservada, única y exclusivamente, para eléctricos. Al no existir una regulación genérica por parte de la Dirección General de Tráfico, las ordenanzas municipales de cada ciudad podrán jugar un papel clave y serán las que dictaminen las diferentes normas de aparcamiento.
Es importante destacar, además, que los coches eléctricos o híbridos podrán estacionar en este tipo de zonas siempre que quieran, pero con un límite de tiempo. Las multas por aparcamiento indebido oscilarán, según el Reglamento de Circulación y las ordenanzas municipales, entre 100 y 200 euros.
Comentarios