Las bicicletas eléctricas ganan terreno a los vehículos a motor: casi se duplica su uso respecto al año pasado

La movilidad en ciudad no solo pasa por los patinetes eléctricos. Las bicicletas siguen siendo un vehículo muy utilizado en los movimientos urbanos y cada vez más usuarios hacen mayor uso de estas. La aparición en el mercado de las bicis eléctricas o con asistencia al pedaleo ha favorecido el incremento de uso de las bicicletas tanto en modalidad privada como a través de apps de uso compartido y sharing. 

El último estudio sobre movilidad urbana realizado por Freenow, la aplicación de movilidad, y desarrollado junto con la consultora Kantar, muestra que la mayoría de los encuestados pone la bicicleta como el vehículo idóneo para incentivar la movilidad sostenible, algo en lo que está de acuerdo el 81% de los españoles.

Las bicicletas eléctricas, el vehículo del futuro

La mitad de este porcentaje considera que promoviendo el uso de la bicicleta es posible conseguir una mejora en la movilidad y hacerla más sostenible y responsable con el medioambiente. De hecho, al 18% de los encuestados le gustaría usar más la bicicleta como su medio de transporte en lugar del coche privado. Las principales ventajas de la bici destacadas por los encuestados las de carácter económico y de salud, además de la reducción de emisiones y del tráfico. 

Desde este panorama actual, los usuarios prevén que de aquí a diez años las bicicletas en general sean el segundo medio de transporte más utilizado en las ciudades (62%), seguido de otras opciones como las bicicletas eléctricas (58%).

Cómo y cuánto se usan las bicicletas en España

En España hay más de 11 millones de personas que utilizan la bicicleta de manera semanal, una tendencia que también se refleja en los datos de Freenow. Los viajes con bicis eléctricas en esta app han crecido un 45% respecto a 2022, mientras que los usuarios de las bicis eléctricas han aumentado un 25%. 

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Eso sí, todavía queda margen de mejora. Según este estudio, solo el 9% de la población española elige la bicicleta como medio de transporte para desplazarse a su lugar de trabajo, por lo que todavía podría crecer más aún el número de usuarios y de trayectos diarios en bici. 

Las principales dificultades que los encuestados han afirmado encontrarse para ir en bici al trabajo es la longitud de las distancias, que consideran demasiada, y una falta de cuidado de los carriles bici, algo en lo que coinciden 4 de 10 usuarios.