El restaurante de Barcelona donde se hacen más de 50 tortillas diferentes

Una tortilla de patata de La Ceba.
Una tortilla de patata de La Ceba.
lacebabcn.com.
Una tortilla de patata de La Ceba.

En el barrio de Gracia, en una pequeña calle de Barcelona, se encuentra un pequeño local en el que, desde hace casi cuarenta años, se hacen unas 60 tortillas de patata diferentes. Hablamos de la Truiteria La Ceba, un restaurante tradicional con platos deliciosos y económicos. Su especialidad está clara: las tortillas españolas. 

En la carta de La Ceba, las tortillas se dividen en tres categorías. La primera de ellas es la de tortillas marineras, que incluye siete tipos distintos, entre ellos tortilla de gambas o de bacalao. Otra de las categorías es la de tortillas de montaña, que incluye 22, cocinadas con diferentes carnes, como chorizo, butifarra, jamón o sobrasada. Por último, La Ceba ofrece unas treinta y tres tortillas de la huerta, con verduras de todo tipo como espinacas, calabacín o tomate. 

En total más de 60 tortillas diferentes, casi todas a un precio de alrededor de 7 euros. A esta enorme oferta se suman platos típicos de la cocina catalana, como el pa amb tomàquet.

Portada de la Truiteria La Ceba
Portada de la Truiteria La Ceba
Web de La Ceba

La receta tradicional de Isabel Calatayud

Hay muchas formas diferentes de cocinar este tradicional plato español. E Isabel Calatayud, la dueña de la Truiteria La Ceba, tiene la suya. 

Las tortillas de patata le recuerdan a su abuela y, de ella, ha heredado su receta. En una entrevista con DW Food, Isabel contaba el truco que observó en la cocina de su abuela: la patata debe cortarse muy fina para que, al freírla, quede crujiente

Si vas a probar una de las tortillas de La Ceba una cosa es segura: va a llevar cebolla. La receta de Isabel incluye este ingrediente, media cebolla cortada muy fina que ha estado pochándose en su jugo durante unas tres o cuatro horas. En el debate entre cebolla sí o no, en La Ceba lo tienen claro (de hecho, ceba en catalán significa cebolla). 

Una vez frita la patata y pochada la cebolla, la cocinera añade los ingredientes al huevo y lo deja reposar durante diez o quince minutos. Este es su truco para que la patata absorba todos los sabores que puede aportar el huevo. 

Ya solo queda formar la tortilla, añadirla a una sartén con aceite y darle la vuelta, un movimiento que seguro Isabel hace muchísimas veces al día. 

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