
"Una visita inexcusable, pues rescata una histórica ferretería y ubica sus salas en unas carbonerías del s. XVI. Cocina tradicional actualizada con productos de máxima calidad", comenta en su página web la Guía Michelin sobre este restaurante ubicado en la madrileña calle Atocha que se ha convertido en todo un reclamo.
Este restaurante abrió sus puertas en 2015 con el objetivo de crear un espacio que reuniera historia, arte y gastronomía. Según María Antonia Escapa, la fundadora de este restaurante, "algo importantísimo fue respetar el local y su historia, creando un espacio y un ambiente único donde todo el mundo se sintiera bienvenido y disfrute de lo que nosotros denominamos 'mucho más que una experiencia gastronómica'".
Ferretería Restaurante está ubicado en lo que era antes una antigua ferretería del siglo XIX, de la que se han mantenido muchos de los muebles y utensilios que se utilizaban entonces, lo que lo convierte en uno de los restaurantes con más encanto de Madrid.
El Taller Ferretero se encuentra justos encima de la entrada del restaurante, y se trata de un espacio con comodidades como cocina, mesa de reuniones, equipo multimedia o hilo musical perfecto para realizar eventos, presentaciones o reuniones.
Qué comer en una ferretería
Para comenzar a abrir boca podemos empezar por un picoteo como croqueta de jamón o de cecina de León, anchoas a la donostiarra, buñuelo de morcilla de León, quesos, embutidos, cecina... con precios comprendidos entre los 3 € y 25 €.
Como compartir es vivir -o eso dicen por ahí-, nada como continuar con unos platos para el centro. Ensaladilla rusa con ventresca, rejos con mahonesa tibia de lima, lomos de Bonito del Norte encebollados, torreznos, oreja de cerdo sellada con salsa romesco o steak tartar, entre otras opciones que podemos degustar por precios entre los 6 € y los 23 €.
A la hora de elegir un plato principal, podemos tirar o bien por el sabor a mar que nos ofrece Ferretería con su rodaballo a la parrilla, bacalao al pil-pil, pulpo a la parrilla o merluza en salsa verde, y si nos apetece carne el solomillo de vaca, la costilla de ternera guisada y asada, rabo de vaca estofado o chuletón de razas ibéricas. Mientras que los platos de pescado se encuentran entre los 25 y 30 €, los de carne se encuentran entre los 27 € y los 65 €, aprox.
En cuanto a los postres, desde torrijas de brioche maceradas en leche merengada hasta milhojas de crema de vainilla y albaricoque, este restaurante nos ofrece una exquisita carta por 8 €.
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