Cualquier época del año es buena para comer fruta, y es que no hay nada como disfrutar de estos alimentos que tanto bien nos hacen a nuestra salud aprovechando los sabores de temporada.
Una de las frutas que más triunfa durante los meses de julio y agosto es el melocotón, y es que su carne jugosa y su piel aterciopelada se encuentra en su mejor versión durante los meses de verano, con sabor más intenso y maduro.
Melocotón, durazno... Lo llames como lo llames, además de como postre o para saciar el hambre entre horas, puedes utilizar esta fruta para acompañar batidos o helados, en galletas o en tartas.
Con el melocotón ocurre como con muchas otras frutas, que hay quienes las prefieren peladas y quienes prefieren disfrutar el aroma, la textura y los ingredientes que se encuentran en la piel, aunque si eres de los primeros, te contamos un sencillo truco para conseguir pelar el melocotón sin necesidad de utilizar cuchillo. ¡Toma nota!
Agua caliente y agua fría
¿Cómo podemos conseguir pelar un melocotón sin tener que tirar de cuchillo? Pues intentando separar la piel de la carne, ¿no? La cosa tiene lógica, aunque no te culpamos si nunca se te ha ocurrido cómo hacerlo.
Para ello necesitas, primero, agua muy caliente, y luego agua muy fría. Pon en una cazuela agua a calentar y cuando rompa a hervir, introduce los melocotones. Solamente tienes que dejar los melocotones dentro del agua unos 30 segundos para que no se nos pasen.
Una vez hayan transcurrido los 30 segundos en el agua hirviendo, saca con una espumadera los melocotones y mételos en un bol lleno de agua muy fría, a poder ser con hielos.
Una vez se haya enfriado los melocotones, sácalos del agua y pélalos con tus propias manos, verás cómo consigues separar la piel de la carne sin problema.
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