La costa norte de España está caracterizada por su accidentado relieve, que premia la vista con sobrecogedores paisajes. Entre San Sebastián y Hondarribia se levanta el monte Jaizkibel como un muro de 545 metros de altura, como una cresta este-oeste paralela a la costa.
La parte más cercana al mar de este monte, cuya cima la ubicamos gracias a una gran antena, parece un lienzo donde la naturaleza ha dado rienda suelta a su creatividad. Patrones geométricos, dibujos abstractos y tramos de colores decoran el relieve rocoso.
Las rutas por el monte Jaizkibel son de nivel moderado. Además, la gran cantidad de helechos y espinos pueden tapar parte del camino, pero las vistas hacia la bahía de Txingudi y las extrañas formaciones de las rocas hacen que valga la pena. Este monte ofrece varias rutas como las dos siguientes:
Ruta de los torreones de Jaizkibel
El monte Jaizkibel alberga vestigios de antiguas batallas, en concreto las libradas durante las Guerras Carlistas. Este recorrido de 18 kilómetros cruza el monte de oeste a este, parte de Pasaia y finaliza en Hondarribia (aunque también se puede hacer en la dirección contraria). Tiene un desnivel de 830 metros aproximadamente y un tiempo estimado es de cinco horas y media. La ruta sigue los torreones dispuestos a lo largo del monte. Podemos acortarla un poco si subimos en coche al aparcamiento en la carretera GI-3440.
Ruta del Valle de los colores
Este itinerario consta de casi 9,6 kilómetros y es de dificultad moderada. Las misteriosas formas y patrones de las rocas están ubicados cerca del acantilado, pero para llegar a ellos hay tramos de maleza que tapan parte del sendero y el cruce de un arroyo puede dificultarse tras días de lluvia, ya que crece su caudal.
Cómo llegar y recomendaciones
El monte Jaizkibel lo rodean las localidades de Fuenterrabía (Hondarribia), Irún, Pasajes, Rentería y Lezo, todas ellas a menos de 25 kilómetros de San Sebastián. El ascenso a pie al monte puede iniciarse de estos puntos, aunque también podemos optar por subir en coche, ya que cuenta con un aparcamiento, cerca de la Torre IV de Jaizkibel.
Las rutas de senderismo, especialmente la de Valle de colores, requieren cierta experiencia, pues son de nivel moderado. Hay que tener en cuenta que para apreciar lo colores de las rocas es importante la hora del día, por tanto, se recomienda ir en un día muy soleado y sobre todo empezar la ruta a primera hora del día. Cabe resaltar que el monte no dispone de fuentes con agua potable y se aconseja evitar caminatas en días de mucho viento.
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