La impresionante ruta por un cañón en Alicante que pasa por debajo de puentes a gran altura

Estret del Mascarat.
Estret del Mascarat.
iStock
Estret del Mascarat.

Un enorme y profundo desfiladero recorre la provincia de Alicante, muy cerca de las localidades de Altea y Calpe. Conocido como el Estret de Mascarat, se formó durante millones de años por la erosión del agua, y ahora nos brinda la oportunidad de hacer una increíble ruta de senderismo que combina la naturaleza con la mano del hombre, ya que sobre nuestras cabezas, a gran altura, quedan varios puentes que cruzan de un lado a otro de la garganta.

La ruta del Estret de Mascarat

El Estret o Cañón del Mascarat se encuentra entre las poblaciones de Altea y Calpe, muy cerca de la costa. La ruta que podremos hacer allí es sencilla, pero a la vez bastante espectacular. Entre la ida y la vuelta se recorren dos kilómetros, de manera que es asequible para todos los niveles. La ruta empieza en la zona urbanizada de Pueblo Mascarat, donde podremos dejar el coche aparcado. Concretamente, inicia junto a la carretera, en el Carrer Freu.

Estret del Mascarat.
Estret del Mascarat.
Getty Images/iStockphoto

Veremos un cartel informativo y la señalización de la ruta. En el cartel leeremos acerca de la leyenda que da nombre al Estret de Mascarat. Esta cuenta que por el barranco discurría un camino antes de que se construyeran los puentes y que por ahí merodeaba un bandolero conocido como El Mascarat, que asaltaba a todo aquel que pasara por allí.

Justo enfrente veremos un puente que cruza el barranco. Nos iremos dirigiendo hacia allí, hasta el punto de que la estructura queda varios metros sobre nuestras cabezas. Se trata del antiguo puente de la N-332, que data de finales del siglo XIX y es el más espectacular de la ruta.

Estret del Mascarat.
Estret del Mascarat.
Getty Images/iStockphoto

Seguiremos adentrándonos cada vez más y más en el barranco, y empezaremos a ver otros puentes al mismo tiempo que las paredes de la garganta van acercándose más y más. El siguiente es el nuevo de la N-332, seguido del que cruza el Tranvía de Alicante. Ver las obras sobre flotando sobre nosotros, atravesando el estrecho barranco, es algo indescriptibles.

Finalmente, llegaremos al final del cañón y la grieta entre las paredes es tan pequeña que ya no permite el paso. Solo nos quedará volver sobre nuestros pasos y pasar de nuevo bajo los puentes, aunque si queremos, al volver de nuevo a la carretera, podemos dirigirnos hacia la izquierda y seguir un sendero señalizado hasta el Mirador de Toix, desde donde tendremos unas maravillosas vistas de la cala escondida del Racó del Corb y de la bahía de Altea.

Apúntate a la newsletter y recibe en tu correo las mejores propuestas para viajar por el mundo.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento