La Navidad transforma por completo las ciudades de toda España cada diciembre. Las urbes de todo el país se engalanan para hacer de esta época del año la más mágica de todas, y algunas realizan un verdadero despliegue ornamental para convertir el centro urbano en un espectáculo de luces. Vigo, Valladolid o Vitoria son solo algunos de los ejemplos, pero hay una metrópoli en la que se viven las semanas navideñas a lo grande: Madrid.
La capital española está repleta de turistas cada día, aunque los fines de semana las calles del centro y las aledañas se llenan aún más, y es que Madrid consigue atraer a miles de visitantes debido a su gran oferta de ocio y la increíble decoración. Desde las típicas luces de la Gran Vía a actividades culturales y experiencias para los más pequeños, en el interior de M-30 se vive la Navidad como en ninguna otra ciudad.
Compras en Gran Vía (si se puede) y la Puerta del Sol
Todo el mundo que se acerca a Madrid en estas fechas va con un objetivo: ver las luces de Navidad de la Gran Vía y realizar las compras navideñas, aunque hay que armarse de paciencia si se va en un fin de semana, sobre todo por la descomunal aglomeración que se forma en ambas aceras. A pesar del monumental tumulto, sigue siendo una de las estampas más bonitas de todo Madrid.
Si no se quiere estar entre tanta gente, una gran opción es subirse al tradicional Naviluz, que recorre las calles más emblemáticas de la capital para que los pasajeros vean los más de 11 millones de bombillas LED que se han instalado este año y que se encienden cada día a partir de las 6 de la tarde en todas las calles del centro. Otro de los lugares que no puedes dejar de visitar si se viaja a Madrid es la Puerta del Sol, donde su nuevo árbol dorado de 35 metros de altura domina el centro de la mítica plaza.
Mercados navideños: Plaza Mayor y Nuevos Ministerios
A pocos minutos andando de Gran Vía, la Plaza de Callao y Plaza España se encuentra la Plaza Mayor de Madrid, que si ya es espléndida todo el año, en Navidad se vuelve todavía más espectacular gracias a sus mercadillos navideños, en los que se pueden encontrar todo tipo de adornos preciosos para que quienes echen un vistazo en las casetas decoren sus casas con un recuerdo precioso de su visita a Madrid.
Otro de los grandes mercadillos navideños de la capital se encuentra en Nuevos Ministerios, en El Corte Inglés de la Castellana. Mediante la línea 6 o 10 de metro (que se puede coger en Plaza España), en apenas 10 minutos se llega a estas increíbles casetas que además de vender regalos también tienen una enorme oferta gastronómica.
Una ruta de belenes por todo Madrid
Una actividad menos conocida pero que también es una de las cosas imprescindibles si se visita Madrid en Navidad es hacer la ruta de Belenes que el ayuntamiento de la capital ha preparado por toda la ciudad. Además, algunos de ellos están en sitios tan emblemáticos como el de la Basílica de San Francisco el Grande o el Palacio de Cibeles, donde su nacimiento se ha convertido en una atracción más de la ciudad.
Patinar sobre hielo en Plaza España
Como cada año, se ha instalado en Plaza España la tradicional pista de patinaje sobre hielo, en la que niños y adultos pueden pasar un rato divertido por tan solo ocho euros. Está abierta al público desde las 10 de la mañana hasta las 10 de la noche, y cada día cientos de personas cruzan sus vallas para deslizarse por uno de los lugares más míticos de la Navidad en Madrid.
Naturaleza Encendida del Jardín Botánico
Para despliegue de luces y decoración navideña, el que se hace en el Real Jardín Botánico. Situado al lado del Museo del Prado, este impresionante entorno es el escenario cada año de la conocida 'Naturaleza Encendida', un espectáculo lumínico en el que la flora cobra aun más vida a través de LEDs que convierten a este espacio en un lugar único en la capital. Su horario es de 18 a 22:45 y su entrada cuesta 19,50 euros.
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