La belleza natural de España es algo que no se puede explicar con palabras. De norte a sur nos maravillaremos con paisajes muy distintos entre ellos, desde espectaculares zonas montañosas hasta bosques, desiertos y playas.
Aquellos que quieran hacer una escapada para sumergirse de lleno en esa naturaleza, encontrarán en Asturias un auténtico paraíso. Por ejemplo, al noroeste del Principado, se sitúa el pintoresco pueblo de Oneta, una pequeña villa rodeada de nada más y nada menos que tres de las cascadas más impresionantes de España. Hacer una excursión hasta las Cascadas de Oneta es un plan perfecto para en familia, incluso con niños pequeños.
Ruta a las Cascadas de Oneta
El pueblo de Oneta se encuentra en el concejo de Villayón, al oeste de Asturias. Tan solo unas pocas casas forman su entramado, pero merece totalmente la pena acercarse hasta allí para descubrir la espectacular naturaleza que lo rodea.
Desde la villa, podremos hacer una sencilla ruta de senderismo que nos adentrará en los bellos paisajes de la zona y nos maravillará con algunos tesoros como las Cascadas de Oneta, tres impresionantes saltos de agua que fluyen entre las rocas y la verde vegetación.
El recorrido tiene una longitud de tan solo 1,5 kilómetros, con lo que es asequible para todos los niveles. Saldremos del centro del pueblo a través de un camino ancho y llano que deja el río de Oneta a su izquierda y las casas a la derecha. Muy pronto veremos como el cauce del río se va estrechando y sus aguas empiezan a correr por formaciones rocosas entre las que se abren pequeños pozos.
Entonces, el cauce se precipita hacia una caída vertical de 38 metros y llegamos así a la primera cascada, bautizada como la Firbia. Si continuamos el curso del río dando un pequeño rodeo, llegaremos a la segunda cascada, la Ulloa, algo más pequeña pero igualmente bella. Por último, con un acceso algo más difícil, encontraremos la tercera y menor, la Maseirúa.
A este increíble camino se suman otros elementos como restos de molinos de agua y una frondosa masa arbórea de fresnos, robles, alisos y castaños, sin olvidar los preciosos narcisos que florecen en los meses de primavera y tiñen de amarillo el interior del bosque.
Cómo llegar a Oneta
El trayecto en coche desde la ciudad de Oviedo y hasta el pueblo de Oneta es de 1 hora y 20 minutos por la A-8. Una vez allí encontraremos un aparcamiento en el centro del pueblo donde podremos dejar el coche sin problema.
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