Nada de cómodos atriles: en 'Mental Masters' se responde a las preguntas subido a un brazo gigante que te menea en todas direcciones

Si algo dicen siempre todos las personas que han sido concursantes en la televisión es que a menudo los nervios juegan malas pasadas. La presión de fallar con las cámaras como testigos, el público, el presentador y el miedo al ridículo es mucha. ¿No quieres caldo? Toma siete tazas. 

Mental Masters es el nuevo concurso de Telecinco, que llega este lunes a las 22.50 h, con Carlos Sobera como presentador y con un brazo robótico gigante al extremo del cual se sientan los concursantes y que los menea en todas direcciones mientras tratan de responder a preguntas de cultura general, habilidad o ingenio. 

Los primeros en probar este concurso, producido junto a Warner Bros. ITVP, serán Santiago Segura, Leticia Dolera, Paco Tous, Kira Miró, Rosa López y Edu Casanova. 

"ADDA, un espectacular brazo robótico con voz propia, les lleva en una cápsula que se mueve en el aire a gran velocidad, girando rápidamente e incluso poniéndolos boca abajo en vertiginosos desplazamientos por el plató, recibiendo a la vez diversos estímulos visuales y sonoros", tal y como lo describen desde Telecinco. 

​Probamos 'Mental Masters'

En 20minutos.es hemos tenido la oportunidad de probar ese ingenio y la sensación que da. Lo primero que llama la atención es que la cápsula en la que te sientas está alta, a unos dos metros de altura, por lo que es necesaria una pasarela de escaleras. Una vez arriba el asiento es ergonómico y el experto en seguridad del programa te ata todo tipo de cinchas y arneses. La seguridad es lo primero: el brazo te va a poner cabeza abajo o de lado y mientras se mueve a toda velocidad.

La pasarela es retirada y los pies quedan colgando. Hay unas agarraderas a los lados para las manos que aportan seguridad, aunque preferimos no usarlas, como el que levanta los brazos en las montañas rusas. 

El primer meneo llega rápido y nos alza hasta un estrado elevado, una suerte de balcón, donde nos espera el director del programa, que hoy hará de Carlos Sobera. 

¿Estamos listos? Lo estamos. ¡Zaaaas!, ADDA comienza a desplazarse rápidamente a la primera columna, de cuatro que hay en el plató. Son a la vez pantallas gigantes en las que podemos ver el tema y la pregunta que se nos plantea. Hay que responder rápido y confirmar la respuesta con una palanca. ¡Acierto!

Un nuevo meneo (ahí oigo mi espalda colocarse con un leve crujido) nos lleva a la siguiente pregunta. Esto es muy divertido. Hace un nudo en el estómago. A la vez, es estresante. En el plató hay muchas luces, colores, focos que se mueven, hay que responder deprisa y además, el cambio de posición te desorienta. Necesitas unos segundos para saber dónde estás, pero no los tienes: la siguiente pregunta ya se está planteando. 

En este viaje de meneos y conocimientos hay una aliada y un pillo. La aliada es ADDA, porque además de portarte como lo haría tu madre si tuviera unos brazos de seis metros capaces de levantar un automóvil, te habla. ADDA tiene buen carácter y juega a favor del concursante. 

En el otro extremo está el presentador, que en esta ocasión adopta un rol socarrón y sarcástico, como solo Carlos Sobera sabe hacerlo y ya demostró en concursos como Date el bote (ETB), ¿Quién quiere ser millonario? o Atrapa un millón. 

Carlos Sobera es humano. ADDA es un brazo robótico cuya versión estándar se utiliza en el mundo de la industria y la medicina de última generación. 

Detrás de cada movimiento de ADDA hay horas de trabajo, pruebas y ensayos en las que se tienen en cuenta todos los factores de seguridad, incluidas las mediciones de la fuerza G (los giros pueden hacer que aumente la gravedad relativa para el concursante), para poder llevar a los concursantes al límite, "siempre dentro de un entorno seguro y divertido", como apunta Telecinco.

Hemos acabado nuestra ronda, pero queremos saber hasta dónde puede llegar ADDA, así que pedimos a los ingenieros del programa un poco de acción. Inmediatamente el robot se mueve a toda velocidad y en todas direcciones, poniéndonos boca abajo, de lado, del derecho y del revés. La sonrisa, ya sea de la impresión o de la diversión, tarda un rato en borrarse. 

La mecánica

Telecinco ha adelantado en qué consiste exactamente Mental Masters. En cada programa, un grupo de seis celebrities pertenecientes a ámbitos tan diversos como la interpretación, el deporte, el cine, la televisión, la música o la moda se sientan en la cápsula de ADDA firmemente sujetos.

Cuando el tiempo empieza a correr, ADDA comienza a desplazarse rápidamente con movimientos 360º mientras la cápsula gira en el aire, llevando a los concursantes alternativamente hasta cuatro torres situadas en las cuatro esquinas del plató, en las que le son enunciadas preguntas que ponen a prueba su memoria, orientación y sus conocimientos, entre otras destrezas.

El participante que logre superar la desorientación y acertar el mayor número de preguntas en el tiempo estipulado pasa a la final del concurso, en la que tratará de conseguir un premio de hasta 20.000 euros, que donará a fines solidarios de su elección