El avance de la inteligencia artificial durante el último año ha sido increíble, a la par que aterrador y está cambiando el mundo. Parece que esto es solamente la punta del iceberg, ya que se desconoce hasta qué límites podría llegar a esta tecnología e incluso si sería capaz algún día de superar al ser humano.
Esta tecnología tiene como objetivo el optimizar tareas repetitivas y monótonas de diferentes trabajos para que así la productividad aumente. Una de estas tareas podría ser la de corregir exámenes y esto es lo que el estado norteamericano quiere probar para ayudar a corregir una alta carga de exámenes de su novedoso sistema STAAR.
Exámenes corregidos por inteligencia artificial
Según el medio Texas Tribune, los exámenes STARR son unas pruebas diseñadas para medir lo que los estudiantes aprenden en cada grado y si están listos para pasar al siguiente. Los alumnos que se presenten serán parte del experimento en las escuelas de Texas, y sus respuestas escritas en los exámenes estandarizados del estado serán calificadas automáticamente por la IA. Esta utiliza procesamiento de lenguaje natural, un componente básico de los chatbots de inteligencia artificial como GPT-4.
En 2023, para este tipo de exámenes necesitaron de unos 6.000 trabajadores temporales para corregir, mientras que este año, se prevé que la cifra disminuya a menos de 2.000. De hecho, la tecnología que se va a utilizar para corregir los exámenes permitirá ahorrar entre 15 y 20 millones de dólares al estado en contratación de personal para corregir. La prueba incluye menos preguntas de opción múltiple y más preguntas abiertas.
¿Qué opinas sobre la regulación de la Inteligencia Artificial por parte de la Unión Europea?
Estas son conocidas como elementos de respuesta construida, que serán corregidas por el modelo de IA. Después, los empleados de la TEA verificarán si las puntuaciones son correctas. Llegado el caso de que el motor de puntuación no entienda alguna de las respuestas que incluyan palabras en otro idioma o términos informales, serán marcadas por la IA y se asignarán a una persona para que lo evalúe.
Si tras hacer el examen, un estudiante no está conforme con su nota, tiene la posibilidad de pagar 50 dólares para solicitar una revisión. Aun así, esto ha generado preocupación entre educadores y padres por la influencia del aprendizaje automático, la automatización y la inteligencia artificial.
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