La Guardia Civil aconseja no perder de vista la tarjeta si pagas con ella: "Solo son necesarios unos segundos para clonarla"

El cliente no debe perder de vista la tarjeta bancaria, puesto que los delincuentes pueden clonarla al instante.
El cliente no debe perder de vista la tarjeta bancaria, puesto que los delincuentes pueden clonarla al instante.
89Stocker vía Canva.com
El cliente no debe perder de vista la tarjeta bancaria, puesto que los delincuentes pueden clonarla al instante.

Las tarjetas de débito o de crédito permiten que las personas puedan salir de casa sin dinero en efectivo encima y asegurarse de que podrán pagar en los establecimientos a los que vaya. Es importante que, al realizar los pagos, el usuario no pierda de vista su tarjeta y que solicite un lector móvil para pagar, tal y como aconseja la Guardia Civil.

Según comentan en un post de Twitter, los estafadores solo necesitan "unos segundos para clonarla". Esta táctica delictiva, conocida como skimming, consiste en extraer datos bancarios, como el nombre del titular, el número, la fecha de vencimiento y el código CVV, y transferirlos a una tarjeta falsa para realizar transacciones.

El verbo 'to skim' en inglés significa 'leer rápidamente' u 'hojear', es decir, la práctica se realiza al instante y la víctima puede no darse cuenta. Los métodos más utilizados son un dispositivo externo diseñado para copiar los datos de la banda magnética, un lector de tarjeta fraudulento, dispositivos incorporados en el interior de los terminales de pago, cámaras ocultas en los cajeros automáticos para grabar las transacciones y claves, y malwares instalados en las terminales.

Para evitar a clonación de tarjetas bancarias, los expertos recomiendan no perder de vista las tarjetas al realizar transacciones o pagar en un local. Además, advierten que la clave o PIN no debe anotarse ni guardarse en el teléfono ni compartirse con nadie y que, al introducirlo en un cajero, lo ideal es tapar el teclado con la otra mano.

Otro consejo es verificar el estado de las terminales de pago para cerciorarse de que no esté manipulada ni haya rastros de pegamento. Los cajeros que se empleen para sacar o meter dinero o para hacer transferencias deben estar bien iluminados, puesto que los delincuentes aprovechan sitios con poca luz para que el usuario no se percate de posibles máquinas manipuladas.

También hay que estar atento a los movimientos de la cuenta bancaria y comprobar que no hay nada sospechoso. Para estar seguro de que no hay ninguna transacción ajena con la tarjeta, lo recomendable es activar las notificaciones desde la app bancaria.

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