Científicos aseguran que el asteroide de la película 'Don’t look up' podría evitarse

La película está protagonizada por Jennifer Lawrence y Leonardo DiCaprio.
La película está protagonizada por Jennifer Lawrence y Leonardo DiCaprio.
Netflix
La película está protagonizada por Jennifer Lawrence y Leonardo DiCaprio.

La película ‘Don’t Look Up’ de Netflix basa su trama en un asteroide que se precipita hacia la Tierra, mientras que los científicos Jennifer Lawrence y Leonardo DiCaprio luchan para que el mundo tome la amenaza en serio.

El éxito de este film de Netflix se basa, para muchos, en que es una alegoría de la inacción del mundo ante el cambio climático. Sin embargo, ahora un par de físicos han analizado detalladamente la cuestión que plantea esta plataforma:

¿Es posible que un asteroide de diez kilómetros de ancho y que está a seis meses de distancia de la Tierra acabe con el planeta? ¿Se puede evitar la catástrofe?

Desde una perspectiva puramente técnica, la respuesta es ‘’.

En el artículo publicado en la base de datos Arxiv , el profesor Philip Lubin y Alex Cohen, ambos investigadores de física de la Universidad de California en Santa Bárbara, han explicado que "mostramos que la humanidad ha cruzado un umbral tecnológico para evitar que 'seguimos el camino de los dinosaurios”.

En este análisis de 15 páginas, se calcula el grado de amenaza que presenta un asteroide de estas dimensiones y matiza que tendría una energía de impacto similar a la del asteroide que provocó la extinción de los dinosaurios hace 66 millones de años.

Permitir que un objeto de este tipo ingrese en la atmósfera de la Tierra podría, en un escenario extremo, aumentar la temperatura atmosférica en 300 ° C, destruyendo prácticamente toda la vida en la Tierra.

El método PI (Pulverize It), establece que el uso de una serie de penetradores para inyectar detonadores nucleares dividirían el asteroide en fragmentos que no alcanzarían a la Tierra por completo o serían lo suficientemente pequeños como para quemarse en la atmósfera. Los fragmentos radiactivos que golpearían la Tierra no serían una gran preocupación, según la publicación.

Por otro lado, este enfoque podrían plantear decisiones políticas, ya que, probar los detonadores antes del despliegue, actualmente, estaría prohibido en virtud del tratado de prohibición de ensayos nucleares.

“En cualquier escenario realista de una amenaza existencial, presumiblemente prevalecería la lógica, al menos uno esperaría”, aseguran los autores,

En la película Meteor (1979), Estados Unidos y la entonces Unión Soviética dejan de lado las tensiones de la Guerra Fría para lidiar con un asteroide entrante.

Por su parte, en Armageddon (1999) los trabajadores de la plataforma petrolera son contratados por la NASA para perforar un asteroide del tamaño de Texas y detonar una bomba nuclear para romperlo en pedazos. 

Esta última, según los investigadores, sería menos realista debido a que estos enormes asteroides existen: Ceres, el primer asteroide detectado, tiene casi este tamaño. Sin embargo, dividirlo por la mitad requeriría alrededor de diez millones de gigatoneladas de TNT, equivalente a más de un millón de veces la energía de todo el arsenal nuclear de la Tierra.

En el caso de que los intentos de desviar o destruir el asteroide entrante fallen, el documento sugiere que los búnkeres submarinos o subterráneos sean una última línea de defensa.

Tomar vida bajo el agua o bajo tierra sería una sabia estrategia basada en la defensa civil para asegurar cierta supervivencia de los humanos y otras especies”, asegura el estudio.

El documento concluye con la nota optimista de que evitar la amenaza existencial de un gran asteroide con destino a la Tierra está justo al límite de nuestras capacidades tecnológicas. “Lo ideal sería que nunca estuviéramos en esta situación, pero mejor preparados que muertos”, han matizado.

Apúntate a nuestra newsletter y recibe en tu correo las últimas noticias sobre tecnología.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento