Orinar es una de nuestras necesidades fisiológicas básicas, pero no siempre podemos aliviarnos cuando queramos, por lo que a veces nos vemos obligados a aguantar las ganas.
Pero aunque pueda parecer inocuo, aguantar durante demasiado tiempo las ganas de hacer pis puede tener nefastas consecuencias para la salud, tal y como recoge en un reportaje el Mirror.
Aunque algunos puedan pensar que sostenerla por un rato puede ayudar al suelo pélvico, nunca es buena idea prolongar la vejiga por mucho tiempo.
Retener la orina puede causar una gran cantidad de problemas de salud, como infecciones, insuficiencia renal y, en el peor de los casos, la vejiga reventada.
Los médicos recomiendan ir al baño al menos cada tres horas, pero para algunas personas esto puede no ser posible. Una vejiga sana puede contener alrededor de medio litro de orina al máximo y, a veces, podría incluso contener más.
Estos son los problemas que pueden surgir:
- No vaciar la vejiga lo suficiente puede provocar una infección del tracto urinario (ITU).
- Retener la orina como hábito puede significar que la vejiga puede comenzar a atrofiarse. Esto eventualmente podría provocar incontinencia.
- Si retienes la micción durante 10 horas o más, puede provocar el desarrollo de retención urinaria. Esto significa que los músculos de la vejiga no pueden relajarse y te resultará difícil orinar, incluso cuando lo desees.
- En casos extremos, contener demasiado la orina puede provocar que la vejiga explote.
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