Vivienda

¿Afectan los imanes a los alimentos que hay en la nevera?

La creación de imanes con fines decorativos pasa por un proceso específico para que no afecten a los electrodomésticos.
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En numerosos hogares, las puertas de las neveras se convierten en un lienzo adornadas con imanes de diversa procedencia. Con el tiempo, estos imanes terminan por convertirse en una colorida colección personal.

Sin embargo, es común encontrarse con titulares alarmantes o vídeos virales que plantean dudas sobre el impacto de estos imanes decorativos y que nos llevan a cuestionar su peligrosidad: ¿pueden afectar negativamente el consumo de energía de nuestro electrodoméstico? ¿Hay riesgo de daño para el aparato en sí? Y quizás la más preocupante de todas: ¿estos imanes pueden influir en la calidad y seguridad de los alimentos que guardamos en su interior?

La respuesta a todas esas inquietudes es que no, los imanes decorativos para neveras son totalmente seguros y no tienen ningún efecto sobre el funcionamiento de refrigerar los alimentos de las neveras, y en este artículo explicamos por qué.

¿De qué están hechos los imanes de nevera?

Tal como recoge la Wikipedia, los imanes para neveras solían ser cilíndricos o rectangulares en sus inicios. Más tarde, se desarrolló un tipo de imán flexible hecho de un compuesto magnético mezclado con plástico. Los imanes decorativos más comunes utilizan ferrita, neodimio, o polvo de hierro con estroncio, entre otros, que a menudo se decoran con elementos hechos con caucho, PVC, porcelana, resina epoxi o una mezcla de materiales. Este proceso se remonta a la década de 1920 y no es tan complejo como puede parecer.

A diferencia de los imanes tradicionales con polos norte y sur claramente definidos, los imanes planos que se usan en las neveras se hacen con una disposición de polos alternados en el lado que queda en contacto con la nevera. La mayoría de los imanes utilizados para las neveras tienen una magnetización especial, conocida como matriz Halbach, que proporciona un campo magnético más fuerte en un lado y prácticamente nulo en el otro.

Dicho de otro modo, estos imanes se fabrican con plena intención de no dañar las neveras ni alterar su funcionamiento en modo alguno, con una fuerza muy débil. "El campo magnético de los imanes decorativos ni siquiera puede traspasar la puerta de la nevera", aclaran desde la Organización de Consumidores y Usuarios para zanjar el bulo.