Por qué no te salen bien las croquetas: tal vez cometas uno de estos 7 errores

Una croqueta normal tiene unas 100 kilocalorías al salir calentita de la sartén.
ARCHIVO

Serán de origen francés, pero las hemos hecho nuestras. Sentimos que las croquetas son muy españolas. Y es que nos encantan. Nunca pasan de moda y siempre saben adaptarse, porque dentro de ellas cabe todo.

Pero debemos reconocerlo. Las croquetas tengan el relleno que tengan, no son el alimento más sano. Una croqueta normal tiene unas 60 kilocalorías y eso antes de freírla. Porque cuando sale calentita y doradita de la sartén ya está en casi 100 kcal.

Un consejo: echa las croquetas al aceite sólo cuando esté muy caliente. Lo que conseguimos de este modo es fortalecer la capa de pan rallado alrededor de la croqueta. Así, la masa no absorberá tanto aceite. De todos modos, siempre conviene, al sacarlas, ponerlas sobre papel de cocina.

En cualquier caso, somos muchos los que seguimos las pautas y no conseguimos que las croquetas nos salgan bien. Oído Cocina Gourmet, proveedores de croquetas de muchos bares y restaurantes, nos recuerdan 7 errores que debemos evitar cometer para hacer unas buenas croquetas.

Una buena base por principio

Preparar una buena bechamel es clave para conseguir unas croquetas de infarto. Para ello, la masa debe ser cremosa. Ni muy líquida, ni demasiado consistente. ¿Cómo conseguirlo? Podemos marcarnos un 50-50-400, es decir, 50 gramos de harina, 50gr de mantequilla y 400ml de leche. Y lo más importante, no hay que dejar de remover.

El tamaño importa

Es importante que nuestras croquetas sean todas iguales, o similares, no solo para que nos entren mejor por los ojos, sino porque así el tiempo de cocinado será el mismo. Un buen truco para conseguir darles forma, y que salgan iguales, es utilizar una manga pastelera o dos cucharas.

No abuses del empanado

Rebozadas con Panko, las croquetas absorben menos aceite.
RESTAURANTE TOBIKO

No hace falta enfundar las croquetas en pan rallado, una capa será suficiente. Si lo que nos gusta es que la croqueta sea realmente crujiente, la mejor opción es usar Panko, una especie de pan rallado japonés de escama un poquito más gruesa que el pan rallado tradicional, pero que absorbe mucho menos aceite.

No vale cualquier aceite

Optar por un buen aceite es tan importante como los ingredientes del relleno. Aunque no solo hay que revisar que sea de calidad. Existen aceites muy buenos, pero no tienen por qué ser los ideales para freír croquetas. La elección de un aceite de oliva suave es la mejor opción puesto que no aporta sabor.

La temperatura estable

La fritura parece fácil, pero no lo es. Se necesita cantidad, unos tres dedos para que no tengamos que dar vuelta a las croquetas y se cocinen de manera homogénea. La temperatura ideal del aceite es 180ºC, para poder mantenerla y que no baje de golpe. Poner demasiada cantidad de croquetas al mismo tiempo hace que el aceite pierda temperatura y se cuezan.

Relleno bueno y generoso

.
IKER MORÁN

La elección de los ingredientes también es crucial. Es importante que cuando comamos una croqueta sepamos inmediatamente de qué están rellenas y para ello es muy importante ser generosos y poner una buena cantidad del ingrediente en cuestión.

Mejor de un día para otro

Prepararlas y cocinarlas el mismo día no es buena idea. Las prisas no son buenas compañeras en la cocina y menos cuando se trata de croquetas. Mejor de un día para otro. Una vez la masa se haya enfriado y hayamos dado forma a nuestras croquetas, lo ideal es dejarlas reposar al menos 12 horas en el frigorífico.

Apúntate a la newsletter de Cocina en 20' y recibe en tu correo recetas para hacer en casa.

loading...