Cuando, tras un paseo, los perros se rascan de forma sospechosa y persistente puede deberse a algo más que un simple picor, podemos estar hablando de pulgas.
Estos pequeños parásitos no solo se alimentan de la sangre de nuestra mascota, sino que transmiten una amplia variedad de enfermedades que también pueden afectar a los humanos.
Si el dinero no alcanza para un buen champú antipulgas o sencillamente no se puede tener uno a mano, desde SDPNoticias recomiendan una serie de recetas artesanales con ingredientes que todos tenemos en casa.
Una de ellas es un champú casero compuesto a base de jabón lavavajillas, vinagre y glicerina. Bastará con mezclar una taza del primer producto, otra de vinagre y unos 60 mililitros de glicerina en un recipiente, mezclar y aplicar después.
Si no hay glicerina a mano, otra solución puede ser mezclar un litro de agua con una taza de vinagre blanco y otra de champú para bebés.
Si la piel de nuestro mejor amigo está irritada por la acción de las pulgas, un champú casero a base de avena puede ser la solución. En este caso bastará con mezclar una taza de avena con otra de bicarbonato de sodio en un litro de agua caliente y aplicar sobre el pelo húmedo del animal.
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