Como destaca la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), "no con todos los pescados hay el mismo riesgo". En este sentido, los pescados que son de río y agua dulce, como es el caso de la trucha, no contienen este parásito.
Los pescados desecados salados de manera tradicional, como el bacalao o las mojamas, tienen un riesgo mínimo de contener anisakis por su proceso de conservación en salazón.
NATALIA MYLOVA/iStockLas almejas, muy populares en muchos platos de nuestra gastronomía, se pueden consumir sin riesgo.
iStock.Los mejillones son unos moluscos bivalvos que no requieren un proceso de congelación porque el riesgo de que contengan este parásito es mínimo.
PixabayComo destaca la AESAN, las semiconservas como las de anchoas (en envase metálico, de vidrio u otras presentaciones) no es necesario congelarlas y el riesgo de que contengan anisakis es bajo.
Los berberechos son una familia de moluscos bivalvos muy comunes en la gastronomía mediterránea. Al igual que sucede con otros moluscos, como las ostras, se pueden consumir crudos porque el riesgo de infección es muy reducido.