Un lugar para comer bien y desconectar. Hablamos del hotel y restaurante El Convent, situado en La Fresneda, el que probablemente sea uno de los pueblos más bonitos de la provincia de Teruel. Este restaurante, incluido en la guía Michelín, ha cautivado a muchos amantes del buen comer, entre ellos al cocinero vasco Karlos Arguiñano.
La historia de amor entre El Convent y Arguiñano comenzó en 2011, cuando el célebre chef visitó la zona para asistir al torneo de MotoGP en Alcañiz, a poco más de 20 kilómetros de La Fresneda. “Le recomendaron que nos visitara para cenar. Antes de sentarse a la mesa ya dijo que en la próxima carrera se quedaría aquí a dormir, y a partir de entonces siempre vino. Ahora no tiene equipo, pero nos visita si viene a las carreras; viene, habla con la gente de la cocina, descansa… aquí desconecta, y siempre habla con cariño de La Fresneda y El Convent”, contaban las propietarias del establecimiento al Heraldo de Aragón en diciembre de 2020.
Y no es de extrañar que el cocinero cayera rendido ante este restaurante, no solo por su cocina tradicional sino también por el increíble entorno en el que se encuentra. El nombre del restaurante, El Convent, viene del propio edifico del local: un antiguo convento, construido en 1613. Un antepasado de las actuales propietarias lo adquirió poco antes de la Segunda República, sobre 1930, para convertir la finca en el hogar de las siguientes generaciones. Continuó siendo una casa familiar hasta que, en 1999, las hermanas Sara, Ana y Diana decidieron reformarlo y convertirlo en un hotel y restaurante.
El restaurante ofrece cocina tradicional elaborada con productos km 0, con hortalizas del huerto, pescado del Mediterráneo y carne de la zona. Las elaboraciones son extremadamente cuidadas y se pueden disfrutar en un menú degustación de 60 €, que incluye sus platos más elaborados, como canelones de papel de arroz rellenos de calamar o solomillo de vacuno con foie y chalotas glaseadas. Si esta opción se escapa de tu presupuesto, El Convent también ofrece un menú 'bistro' de primavera por 28 €, que incluye incluso opciones veganas, para que nadie se quede fuera de la experiencia.
El pueblo de La Fresneda, un entorno mágico
La Fresneda es uno de los pueblos más bonitos de la comarca del Matarraña, en el este de Teruel. Este pueblo aragonés ha sido reconocido como un destino ideal por la Agrupación de los Pueblos Mágicos de España. Se trata de una agrupación que nació con el objetivo de ayudar a los municipios a poner en valor sus entornos y fomentar el turismo local. Desde la asociación analizan cada territorio según distintos criterios, como su calidad de vida, su patrimonio, sus fiestas, su gastronomía, sus paisajes… Y, sin duda, La Fresneda destaca en todos ellos, lo que lo hace un destino turístico “mágico”.
Si decides pasar por El Convent a probar su cocina, no dudes en dar una vuelta por La Fresneda y apreciar su arquitectura y encanto. Su plaza Mayor es una de las más bonitas de todo Aragón, con edificios de estilo gótico-renacentista.
Merece la pena pasear por las calles y callejuelas fresnedinas, llenas de edificios de piedra y azulete y dirigirse hacia otro de sus monumentos más bonitos, el Palacio del Marqués de Tosos, construido en el siglo XVI. Y si eres amante de la naturaleza, los alrededores del pueblo, la ribera del río Matarraña, ofrece un ecosistema muy bien conservado, con una rica y sorprendente fauna.
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