Qué consume más la cocina de gas o de inducción: ¿Cuál elegir?

La seguridad, la limpieza o el sabor de la comida, son factores a tener en cuenta para elegir una cocina de gas o de inducción, pero si lo más importante es saber cuál de ellas consume más energía, te resolvemos la duda. 

Una persona enciende un fuego en una cocina de gas.
Una persona enciende un fuego en una cocina de gas.
EUROPA PRESS
Una persona enciende un fuego en una cocina de gas.

Cuando te vas a comprar una casa o te toca renovar la cocina de tu hogar, se abre la duda que atormenta a cualquier persona en España, ¿pongo placa de inducción o una cocina de gas?

Hay varios factores que te van a llevar a tomar una u otra decisión, como la seguridad de la cocina, la facilidad a la hora de limpiar el electrodoméstico, el sabor que da a la comida, etc. Aunque, es probable que la variable más importante a la hora de elegir una cocina de inducción o de gas, sea el consumo que tenga cada una, es decir, la cuantía de la factura mensual. A todo el mundo le gusta ahorrar —siempre y cuando sea posible—, por ello, te explicamos cual de estas dos opciones es la menos energía consume

Cocina de gas o cocina de inducción, ¿cuál gasta más energía?

Si el único factor que se va a tener en cuenta es el del precio en la factura, el gasto de energía, sin duda alguna la elegida para ahorrar debería ser la de inducción, ya que la cocina de gas consume más.

Es cierto que la instalación de una placa de inducción es más cara y que el gas natural, actualmente, está más batato que la electricidad. Pero en cuanto a la eficiencia, la inducción no tiene rival; se calienta muy rápido y consume menos energía, que es lo que va a hacer que ahorres mes a mes si se compara con el gasto de una cocina de gas. 

Pros y contras de la inducción y el gas natural

Como explicábamos en el anterior punto, si lo único que te preocupa es ahorrar a final de mes, la inducción es la adecuada, aunque suponga una inversión inicial más costosa que al poner una cocina de gas natural.

Además, la opción de poner una placa de inducción también resulta mucho más atractiva si te importa la facilidad a la hora de limpiar la cocina. Mientras el sistema de fuegos es mucho más aparatoso porque hay que desmontarlos, limpiarlos en profundidad, secarlos muy bien, etc., la cocina de inducción tan solo necesita un producto especial para su limpieza —que se vende en cualquier supermercado—, una balleta para pasarla por la superficie, y una rasqueta para quitar —con cuidado— los restos de comida que se hayan quedado secos.

En cuanto a la seguridad del electrodoméstico, la placa de inducción también se lleva la palma. Mientras que la cocina de gas natural puede tener alguna fuga, algo que es muy peligroso, la inducción es mucho más segura, ya que funciona con electricidad.

Por último, la última variable para tener en cuenta, es el sabor de las comidas cuando se hacen con una u otra cocina. En este punto, es cierto que muchos expertos afirman que el sabor es considerablemente mejor cuando la comida se ha hecho en una cocina de gas, con fuegos. Esto no significa que las recetas hechas en una placa de inducción no estén buenas, pero es cierto que no saben igual que las que se han cocinado con fuego.

Apúntate a nuestra newsletter y recibe en tu correo las mejores novedades para disfrutar al máximo del placer de comer.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento