Olvida la leche: este es el truco definitivo para unos huevos revueltos perfectos

Los huevos revueltos son un plato indispensable en desayunos de todo el mundo, sobre todo en los países anglosajones. En España es una comida más versátil, que podemos almorzar o cenar. 

Pero pese a que en principio puede parecer un plato sencillo, lograr el punto justo de los huevos y que tengan el aspecto de lo que sirven en los mejores hoteles no es tan fácil.

Existe la creencia de que la textura de los huevos revueltos se consigue añadiendo leche a los huevos batidos, pero podría ser todo lo contrario. Tal y como recoge el Mirror, el chef Dan Joines, propietario de varios restaurantes galardonados en Londres, desaconseja el uso de leche.

"Nunca agregues leche a tus huevos revueltos; diluye el sabor y hace que sea más probable que se vuelvan gomosos", dice Joines, que en cambio revela cuál  es el ingrediente que para él es imprescindible.

"Siempre es mantequilla para mí. Asegúrate de que la mantequilla esté dorada, pero no marrón, antes de poner los huevos. Sigue revolviendo a fuego medio o bajo. Mantenlos en movimiento y doblándolos con una espátula hasta que estén ligeramente líquidos, pero unidos", dice.

Otro chef, Luke Selby, también está de acuerdo con la teoría. Selby, que trabaja en el restaurante Hide de Londres, insistió en la idea: "Poner leche en tus huevos revueltos es un pecado capital", dijo el chef. "Simplemente los moja demasiado, como en los menús escolares", dijo.

La chef y escritora gastronómica irlandesa Laoise Casey reveló recientemente en que la mantequilla es el ingrediente clave para hacer huevos revueltos, pero tiene otro truco especial para los huevos.

"Agregue una cucharadita de leche en polvo con los huevos y el resultado es un maravilloso revuelto, que queda casi como queso. De hecho, la leche en polvo puede realzar muchos platos... desde helado hasta pastelería o salsa de caramelo", dijo.