'Ojo de Halcón' ('Hawkeye') 1x06 [final]: "Vamos a morir"

[ESTE ARTÍCULO CONTIENE SPOILERS DE OJO DE HALCÓN 1x06]

El penúltimo episodio de Ojo de Halcón nos despedía la semana pasada con Kingpin (Vincent D'Onofrio), el carismático villano de Daredevil, descubriéndose como el jefazo detrás de toda la trama criminal de la serie, y con Eleanor Bishop (Vera Farmiga) como aliada. Recordemos que la madre de Kate (Hailee Steinfeld) había contratado a Yelena (Florence Pugh) para que matara a Clint (Jeremy Renner), mientras que Wilson Fisk era el responsable del asesinato del padre de Maya (Alaqua Cox) a manos de Ronin. 

El último capítulo de la serie marvelita arranca explicando cómo hemos llegado hasta aquí con una reunión entre Fisk y Eleanor que desvela que el padre de la protagonista debía dinero al pez gordo, por lo que su madre se asoció con él. Ella fue la culpable de la muerte de Armand e incriminó a su prometido Jack Duquesne (Tony Dalton), pero ahora que su hija se acerca peligrosamente a la verdad, quiere dejar los negocios turbios con la mafia neoyorquina. 

Kate y Clint ven el encuentro a través de una grabación que les pasa Yelena y el vengador decide quedarse en la ciudad hasta zanjar el tema ahora que la madre de su socia (por fin lo dice él, no nosotros) corre peligro.

Pocos minutos después, Kingpin, el único capo capaz de combinar americana blanca con camisa roja hawaiana, se reúne con Maya. Ella insiste en que ha entrado en razón en todo lo referente a Ronin y le pide unos días libres para despejase. Él se los concede, pero no la cree. El mandamás de Nueva York está entre las cuerdas, con un vengador rondando cerca, Eleanor traicionándolo y Maya dándole la espalda. "La gente necesita que le recordemos que esta ciudad me pertenece", le dice a Kazi (Fra Fee).

Tiempo de superflechas

Entre tanto, Clint y Kate se preparan para la fiesta navideña de esa noche organizada por la madre de la arquera fabricando nuevas flechas especiales y superpeligrosas. El vengador juega con spray de pimienta, imanes y artilugios de industrias Stark mientras su protegida va poniendo nombre a esas armas: Superpeligrosa, Airbag, helada, destello, rompehielos...

Ojo de Halcón quiere cerciorarse de que Kate está preparada para la batalla final, a lo que ella responde contándole el impacto que tuvo en ella verlo luchar contra extraterrestres en 2012: "Me enseñaste que ser un héroe no es solo para gente que puede volar o lanzar láseres con las manos. Es para cualquiera que tenga agallas para hacer lo correcto sin importar el coste".

Cinemanía

Ya de noche, la dupla de arqueros acude con sus mejores galas a la fiesta en el Rockefeller Center. Allí están rodeados de aliados de los Larpers disfrazados de camareros. Entre los invitados, están Jack, que ha acudido con una espada, y Yelena, a la caza de Clint. Kate pide explicaciones a su madre, pero ella insiste en que no le quedó otra que aliarse con Fisk por la deuda de su padre y que lo tiene todo bajo control. 

La acción arranca a los pocos segundos, cuando Kazi, situado en un edifico que hay enfrente, dispara a Clint. Las balas se suceden, los cristales se rompen y todo el mundo huye de la sala principal. Los Larpers tratan de desalojar a los presentes mientras Kate intenta impedir que Yelena alcance a Clint, que a su vez dispara una flecha con humo para inutilizar a Kazi. 

Sin duda, el enfrentamiento más entretenido en esta parte del episodio es el protagonizado por Kate y Yelena, desde un ascensor hasta las diferentes salas de una planta que van atravesando entre empujones, patadas y aplastamientos contra cristales. La espía rusa acaba precipitándose por una de las ventanas para disparar en pleno descenso a Clint, pero falla. La sigue Kate, con algo menos de estilo, aunque pisando la calle sana y salva.

Flechazo final

Kate debe enfrentarse a los del chándal a las puertas del Rockefeller Center con la ayuda del 'Espadachín' Jack mientras Clint, tras luchar cuerpo a cuerpo contra Kazi y sus hombres, se lanza por la ventana y cae en el icónico árbol de Navidad, donde se topa con un búho. Los Larpers, ya con sus atuendos de lucha, siguen sacando gente del edificio cuando Kate, con su mejor puntería, consigue que el árbol gigante en el que está su compañero caiga sobre la pista de hielo. 

En esa pista que tantas veces hemos visto en el audiovisual se da una nueva batalla entre Kate y Clint, que se deslizan por la pista luciendo trajes superheroicos nuevos, y los del chándal. La discípula se queda con la flecha superpeligrosa a la vez que ambos empiezan a lanzar todo tipo de armas puntiagudas: algunas ciegan, otras tienen cuchillas, otras congelan piernas, algunas inmovilizan, otras forman ondas expansivas. Incluso hay una capaz de empequeñecer una furgoneta. 

Cinemanía

En la última parte del asalto, acudimos a tres disputas en tres escenarios diferentes: por un lado, la lucha de Kate contra Kingpin en una juguetería para impedir que este acabe con su madre; por otro, el enfrentamiento (emocional y físico) sobre hielo entre Yelena y Clint; y, finalmente, la pelea entre Maya y Kazi no muy lejos de la pista. En el primer campo de batalla, Kate sufre los golpes del forzudo Fisk, pero consigue vencerlo con ayuda de su madre, que lo arrolla con el coche, y esa flecha superpeligrosa que lo lanza por los aires. Eso sí, su madre termina siendo arrestada por sus crímenes. 

En cuanto a Clint, este trata de hacer entender a la hermana de Natasha (Scarlett Johansson) que el sacrificio de esta fue una decisión que tomó ella misma sin que él pudiera hacer nada. Finalmente consigue que la rubia entre en razón (no sin llevarse antes varios golpes con su vara) emulando el silbido secreto que esta y Nat compartían, y diciéndole lo mucho que su hermana se preocupaba por su bienestar. 

Maya, por su parte, trata de que Kazi empiece de cero con ella, pero este se niega y termina muriendo en brazos de la joven. Impulsada por su rabia, Maya localiza a Fisk, que huía de la juguetería malherido. Suenan villancicos en la radio del coche mientras ella saca la pistola y lo dispara fuera de cámara.

A casa por Navidad

Después de la tormenta llega la calma y, en el caso de Ojo de Halcón, lo hace con Clint regresando a casa por Navidad, como había prometido a su familia. Se lleva con él al perro Lucky y a su socia Kate Bishop, a la que ya ha confesado su orgullo. Así, nos dirigimos a esa morada de los Barton que tan bien conocemos desde Vengadores: La era de Ultrón, ahora rodeada de nieve. 

El arquero devuelve a su mujer Laura (Linda Cardellini) aquel reloj que desapareció durante la subasta ilegal en Nueva York y que escondía secretos de su pasado. Al darle la vuelta al reloj, vemos el emblema de SHIELD, con el número 19. ¿Significa esto que Laura era la Agente 19 de SHIELD? En los tebeos, este número de la agencia pertenece a la superheroína Mockingbird (Pájaro Burlón en castellano). 

'Ojo de Halcón' desvela una nueva superheroína del MCU 

Aunque en las páginas su nombre real es Bobbi Morse y se trata de una exmujer de Clint (su pareja más estable), bien podrían haber adaptado su historia para la pantalla. En los cómics, Pájaro Burlón fue líder junto a Clint de los West Coast Avengers (en España se les llamó Los Nuevos Vengadores), un equipo en el que también estaban Bruja Escarlata y Visión. Además, en el arco de Invasión Secreta, el personaje fue reemplazado por una agente skrull... ¿Estará la serie homónima del MCU preparando algo relacionado con esta trama? 

Cinemanía

En los últimos minutos del capítulo, vemos a Kate y Clint quemando el traje de Ronin mientras la joven propone seudónimos de superheroína: "Lady Halcón". "Halcón crepúsculo". "Halconazo". "Lady flecha". Cómo regalo de Navidad, la serie nos deleita con una escena postcréditos que guarda el número completo de Podría pasarme el día así, perteneciente a Rogers-el musical. 

La serie cierra así la trama en torno a Ronin con Clint haciendo las paces con su pasado. Sin embargo, hay incógnitas por resolver y subtramas abiertas para el futuro del MCU: ¿Ha fallecido Kingpin realmente? ¿Sabremos más de él en la serie sobre Echo? ¿Veremos a Laura Barton como Mockingbird? ¿Volverá Clint a coger el arco de Ojo de Halcón o se lo cederá a Kate?

Puede que Ojo de Halcón no haya sido la apuesta más ambiciosa ni rompedora de Marvel Studios, pero tampoco lo pretendía y en su sencillez reside precisamente su virtuosismo. Con una historia callejera y un objetivo simple, el de que Clint lidie con sus fantasmas del pasado para poder volver a casa por Navidad, la ficción ha resultado ser un goce navideño divertido, emotivo e inmensamente disfrutable que, además, nos ha encandilado con el entusiasmo de Kate Bishop. El futuro marvelita en pantalla no podría pintar mejor (Jóvenes Vengadores, ¿estáis ahí). 

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