Tras varios meses con dosis semanales de acción, Jujutsu Kaisen finalmente ha concluido su segunda temporada. El Incidente de Shibuya, que tanto prometía antes de comenzar, ha dejado muy buen sabor de boca y ha situado a la obra basada en el manga creado por Gege Akutami como una de las mejores series de anime de este 2023.
La segunda entrega comenzó con un pequeño arco, llamado el Inventario Oculto, en el que se revelaron aspectos de la amistad que Satoru Gojo y Surugu Geto mantuvieron en su época como estudiantes. Este vistazo al pasado fue fundamental para entender muchos aspectos clave de lo ocurrido en Shibuya.
Suguru Geto y el resto de maldiciones especiales con las que formó una alianza despliegan una serie de barreras en el distrito durante la noche de Halloween. La única condición para acabar con este secuestro masivo es que Satoru Gojo se presente allí. El hechicero más fuerte lo hace en solitario, aunque más tarde será acompañado por más miembros de la Escuela de Hechicería de Tokio, entre ellos Yuji Itadori, nuestro protagonista. A partir de ahí se desencadena una serie de sucesos clave para la historia de Jujutsu Kaisen.
El más impactante tiene que ver con Satoru Gojo, que es sellado en una prisión confinadora tras descubrir que Kenjaku, un hechicero milenario, es quien realmente ocupa el cuerpo del difunto Suguru Geto. Comienza así una operación de rescate que se cobra las vidas de muchos personajes principales, como Kento Nanami o Kugisaki Nobara (aparentemente).
Este arco nos ha dejado peleas épicas como las de Sukuna contra Jogo y posteriormente Mahoraga, o Fushiguro Toji revivido frente a su hijo Megumi. Por su parte, Itadori experimentó un desarrollo de personaje brutal tras enfrentarse primero a Choso y luego a Mahito con la ayuda de Aoi Todo.
El plan maestro de Kenjaku
Durante toda esta temporada repleta de acción, hemos visto cómo el falso Suguru Geto permanecía en un segundo plano hasta la recta final, donde se ha podido mostrar como el antagonista principal. En el último episodio revela su plan maestro, que ahora explicaremos para aquellos que no lo hayan entendido del todo bien.
Durante cientos de años, Kenjaku ha ido ocupando diferentes cuerpos, entre ellos el de Noritoshi Kamo, el hechicero más malvado de la historia. Bajo esta identidad creó los nueve úteros malditos al fusionar maldiciones y humanos. De ahí salieron Choso y sus dos hermanos. En capítulos anteriores descubrimos que, de alguna forma, el propio Choso e Itadori están emparentados sanguíneamente, aunque no se han revelado más detalles al respecto.
Estos híbridos no fueron suficientes para Kenjaku, que busca la mejor forma de optimizar la energía maldita y conseguir un ser superior a humanos y maldiciones. Durante mil años, se dedicó a sellar pactos con distintos hechiceros. Posteriormente, marcó a una serie de humanos, entre ellos la hermana de Megumi, con los restos de esos hechiceros con los que selló contratos. Llegado el momento, estos humanos sin potencial maldito se convertirán en hechiceros (no todo el mundo puede) o recipientes como Itadori y así acoger maldiciones en su interior.
El falso Geto aprovechó la pelea de Itadori y Mahito, ya que sirvió para que la maldición evolucionara su técnica ritual hasta el máximo. Posteriormente, tras la victoria de Itadori, apareció para absorber a Mahito y utilizar su Mutación Inactiva para comenzar su propio ritual y transformar a las mil personas que marcó. A su vez, liberó millones de maldiciones para sumir a Tokio en un caos.
Todo el desastre de Kenjaku sirve para iniciar una nueva era parecida al periodo Heian, en el que Sukuna gobernaba como rey de las maldiciones. De hecho, el villano se dirige al propio Sukuna, que está en el interior de Itadori, antes de desaparecer de la escena. Por otro lado, el plan de ahora en adelante será enfrentar entre sí a todos los individuos modificados para comprobar hasta dónde puede llegar la humanidad.
El mundo tras Shibuya
El terrible incidente en el corazón de Tokio marca a la sociedad japonesa, como podemos comprobar en el último capítulo. El país está totalmente agitado y atosigado por las miles de maldiciones liberadas. Además, se ha hecho pública la existencia de estos seres, así como de la hechicería.
Se vuelve a decretar la pena de muerte para Suguru Geto, al que se le creía muerto (realmente es Kenjaku). También se declara a Satoru Gojo traidor y cómplice del Incidente de Shibuya, y cualquiera que intente sacarlo de la prisión confinadora será ejecutado. Por otro lado, se condena a muerte a Masamichi Yaga, director de la Escuela de Tokio, y a Yuji Itadori, recipiente de Sukuna. El encargado de acabar con este último será Yuta Okkotsu, uno de los hechiceros de grado especial al que conocimos en la película Jujutsu Kaisen 0.
Se confirma la tercera temporada
Tras la emisión del último episodio, el estudio MAPPA anunció la tercera temporada de Jujutsu Kaisen, aunque todavía sin fecha de estreno. Fue presentada como los Juegos de Sacrificio, el nombre que recibe el macabro experimento que Kenjaku quiere llevar a cabo.
(A CONTINUACIÓN, SPOILERS DEL MANGA)
Los Juegos de Sacrificio no son lo más inmediato al Incidente de Shibuya. Siguiendo el manga, lo que esperamos a continuación es el Arco del Exterminio de Itadori, en el que veremos a Yuta Okkotsu enfrentarse a nuestro protagonista. Posteriormente le sigue el Arco de Preparación Perfecta, con una Maki Zenin (sí, sigue viva) como personaje principal que deberá enfrentarse a su propio clan.
Todavía se desconoce si estos dos arcos se incluirán dentro de la tercera temporada, de la misma forma que el Inventario Oculto se presentó antes de Shibuya, o si se presentará alguna película antes de la llegada de la tercera entrega, algo muy factible para la pelea entre Yuta e Itadori. Tendremos que esperar, pero los fans de Jujutsu Kaisen pueden respirar tranquilos porque el anime seguirá adelante en los próximos años.
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