El campo de los efectos visuales en Hollywood está actualmente copado por dos grandes compañías: WETA Digital, fundada por Peter Jackson en Nueva Zelanda (es la que ha estado detrás de El señor de los anillos y de grandes creaciones como Gollum o el César de la última trilogía de El planeta de los simios) e Industrial Light & Magic, fundada por George Lucas. ILM ha sido la empresa pionera, responsable de Star Wars, y también es la que está detrás del Universo de Marvel. Con un campo de batalla tan estrecho es inevitable que afloren las competitividades, y James Cameron acaba de echar bastante leña al fuego durante una entrevista con Comic Book por el estreno de Avatar: El sentido del agua.
La promoción de la esperada Avatar 2 (en cines este 16 de diciembre) nos está brindando a un Cameron de vuelta de todo, deseoso de chacotearse del estado actual del blockbuster. Por eso se burló de los superhéroes de Marvel y DC asegurando que “no importa la edad de los personajes, todos actúan como si estuvieran en la universidad”, y ahora se ha topado con una nueva oportunidad de lanzarle pullas al MCU en lo referente al VFX. “He de decir de antemano que no quiero faltarle al Universo de Marvel o DC”, empezó diciendo Cameron, consciente de lo que escocieron sus palabras sobre los justicieros universitarios. “Obviamente, las grandes adaptaciones de cómics han impulsado el volumen de la industria. El crecimiento de la técnica nos ha beneficiado a todos”.
“Te proporciona artistas de mayor calidad, más herramientas y código. Hay más gente talentosa que nunca escribiendo código”, prosigue. “Nuestro equipo de WETA Digital hace constantemente nuevas contrataciones y engrosa cantera, así que todo mejora”. Y aquí vienen las curvas. “Dicho esto, WETA Effects, como se llama ahora, es la mejor en lo suyo, ¿verdad? Industrial Light & Magic hace un gran trabajo, pero cuando se trata del tipo de asuntos faciales emotivos que nosotros hacemos… ¿Thanos? Venga ya. Ya has visto Avatar 2. Ni siquiera se le acerca, y esto lo hizo WETA”. Cameron cree que lo logrado por ILM en el Marvel no está “ni de lejos” a la altura de los efectos de Avatar 2.
Ha elegido bien el blanco, pues el Thanos de Josh Brolin que fue el gran villano de Vengadores: Infinity War y Endgame ha sido vendido como una de las grandes creaciones del estudio. Para el director de Titanic, sin embargo, no tiene sentido compararlos con el aspecto de los Na’vi, y sus lapidarias opiniones llegan en un punto muy delicado para la percepción pública del CGI en Marvel, pues a cada nuevo proyecto se han acumulado las críticas por lo mal que gestiona este departamento. Se ha denunciado explotación, calendarios imposibles y condiciones penosas, dándose el caso de artistas que abandonan la industria ante esta situación y siendo Thor: Love and Thunder un posible punto de ebullición.
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