Pasan los días y Saltburn sigue siendo una de las películas más comentadas del momento. El largometraje de Emerald Fennell, disponible desde el pasado 22 de diciembre en Prime Video, da mucho de qué hablar por incontables factores: su elenco (o bien podríamos resumirlo a Jacob Elordi siendo guapo), su argumento o su cuidada fotografía.
Pero sin duda, lo que más se ve por las redes sociales es la incredulidad de la gente al ver ciertas escenas del filme. Algunos momentos han generado reacciones muy diversas, y más de uno las ha grabado en tiempo real. Las caras de muchas personas viendo Saltburn no tienen desperdicio y, por supuesto, se han hecho virales.
Pero esta no es la tendencia que nos ocupa. Hay otra mucho más compartida que tiene que ver con Barry Keoghan, quien realizó una enorme interpretación en su papel protagonista. Tranquilidad, nadie se ha puesto a recrear la escena de la bañera, aunque esta haya dado pie a que unas velas aromáticas "inspiradas" en el agua de baño de Jacob Elordi se agoten en las tiendas online.
El trend de TikTok relacionado con Saltburn que más se ha repetido estos días está basado en la escena en la que Keoghan recorre las habitaciones de la mansión completamente desnudo. No, la gente no la ha recreado exactamente de la misma forma, pero sí que ha sido una excusa perfecta para que los ricos nos muestren sus suntuosos hogares.
Para sumarte a esta divertida tendencia solo hacen falta unos pocos requisitos: un móvil para grabar, seguir el ritmo de Murder on the Dancefloor de Sophie Ellis-Bextor, tener una casa del tamaño de un campo de fútbol y que los nombres de tus padres aparezcan en azul en Wikipedia.
El resultado ha sido una serie de vídeos en los que personas recorren sus casas al son de la canción y el resto de mortales se asombran por detalles tan curiosos como que haya más de un árbol de Navidad o que realmente exista gente que vive en un castillo parecido al de la película.
Pero tampoco hay que generalizar, muchas otras personas han hecho este mismo trend en casas normales y el resultado también es divertido. En definitiva, no hace falta que vivas en una mansión para sentirte como Barry Keoghan en Saltburn, pero tampoco te lo creas demasiado.
¿Quieres estar a la última de todas las novedades de cine y series? Apúntate a nuestra newsletter.
Comentarios