Con el director Doug Lyman cabreadísimo con Prime Video por relegar su filme al streaming, y con los críticos que no se deciden sobre si considerarla un bodrio o un futuro clásico del desparrame, Road House sigue adelante su carrera comercial. El remake de De profesión, duro, filme de culto protagonizado por Patrick Swayze en 1989, dignifica el siempre arduo oficio de portero de garito cutre a base de acción desenfrenada.
Jake Gyllenhaal, protagonista de esta nueva versión, acaba de revelar un homenaje a Patrick Swayze que él mismo introdujo en la película. Un tributo, además, que ha llevado impreso en la piel, porque tiene que ver con sus tatuajes.
¿Qué significan los tatuajes de 'Road House'?
En Road House, Gyllenhaal interpreta a Dalton, un exluchador que acaba metiéndose en la bronca de su vida tras aceptar un trabajo como 'puerta' en un bar de Florida. Para sentirse más cerca de su personaje, el actor decidió introducir un guiño al actor del original marcado sobre sus bíceps.
"Llevo un par de tatuajes en honor a Patrick [Swayze]", reconoció el actor durante el rodaje, en una entrevista con Decider. "Cuando me los ponen por las mañanas, me recuerdan la historia de esta película", añade, recordando que Swayze y él trabajaron juntos en los comienzos de su carrera.
"Yo conocí a Patrick", recuerda Gyllenhaal. "Trabajamos juntos en Donnie Darko y siempre fue muy amable. Quería rendirle homenaje y llevarle conmigo", explica. Ahora bien: el actor no llegó a los extremos de Robert De Niro en El cabo del miedo, porque dichos 'tatus' no son reales sino obra del departamento de maquillaje.
Gyllenhaal, eso sí, se niega a dar detalles sobre estos homenajes a su predecesor, fallecido en 2009 a causa de un cáncer de páncreas. "Dale al 'pause' y mira: los encontrarás", afirma, señalando que es su forma particular de añadir easter eggs a la película.
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