'Argylle': la escena postcréditos que cambia el significado de la película

La nueva comedia de espías de Matthew Vaughn ('Kingsman') contiene una escena postcréditos que revoluciona el cine del director. ¿Se viene franquicia?
Henry Cavill en 'Argylle'
Henry Cavill en 'Argylle'
Cinemanía
Henry Cavill en 'Argylle'

[ESTA PELÍCULA CONTIENE SPOILERS DE ARGYLLE]

Matthew Vaughn amplía su plantilla de espías cachondos con Argylle, su nueva comedia protagonizada por Bryce Dallas Howard y Herny Cavill. El director de éxitos renovadores de géneros como Kick-Ass y Kingsman regresa a la acción con esta apuesta sacada de la novela de Elly Conway, una misteriosa autora cuya identidad es un misterio. 

Esa misma autora presta su nombre a la escritora protagonista de esta historia, interpretada por Howard, que ve cómo su tranquila vida con su gato da un giro de 180 grados cuando la trama de su saga literaria de espías cobra vida y depende de ella exponer a la División, el sindicato criminal que la persigue. 

Durante más de dos horas de metraje, acompañamos a Elly en una aventuras repleta de giros de guion y descubrimos que, en realidad, la protagonista es Rachel Kelly, una agente secreta a quien han lavado el cerebro. Así, Kelly ha reflejado en Argylle (Cavill), el espía de sus novelas de éxito, su propia historia. 

Vaughn se guarda varios ases más en la manga, como la traición de Elly a su organización secreta para compincharse con los enemigos, o su redención final aliándose una vez más con Aiden (Sam Rockwell), su compañero de misiones (y de amores). En los últimos minutos del filme, la pareja consigue frenar a sus adversarios de la División y destapar los datos que los comprometen.

Sin embargo, tras salir airosos de esta labor, Vaughn aún les guarda una última escena en la que Elly/Rachel presenta su nuevo libro sobre Argylle delante de varios lectores. El último fan en sumarse al turno de preguntas no es otro que Henry Cavill, es decir, Argylle (aunque con melena y tupé), a quien la protagonista mira con cara de sorpresa. Él asegura que seguramente ella tenga muchas preguntas que hacerle. 

No contento con sorprendernos con este giro final, el director lo une a su escena postcréditos, en la que nos da más pistas sobre Argylle y, con ello, cambia por completo el significado del filme que acabamos de ver. 

'Argylle': escena postcréditos

'Kingsman' y 'Argylle'
'Kingsman' y 'Argylle'
Cinemanía

Argylle bebe de Kingsman en contenido y forma. No contenta con recuperar a actores de la primera entrega como Samuel L. Jackson y Sofia Boutella, que daban vida al villano con ceceo y su secuaz en el filme de Firth y Egerton, cuanto más avanza la trama, más similar se vuelve a la saga de Vaughn en sus escenas de acción coloridas y el tono paródico. ¿Será un aviso de lo que se viene?

La escena postcréditos nos traslada 20 años antes de los hechos acontecidos en Argylle, a un pub inglés llamado The King's Man. Dentro, un joven interpretado por Louis Partridge (Enola Holmes) se acerca a la barra para pedir un complicado cóctel que no es otra cosa que un código. 

El dueño del local le muestra una caja que contiene una pistola mientras el protagonista se presenta como Aubrey Argylle. A continuación, la pantalla anuncia que Argylle: el primer libro llegará pronto a las pantallas, vaticinando una precuela de Argylle. 

Así, Louis Partridge es la versión joven del personaje de Cavill, que, según el final del filme, también existe en el presente de Argylle y podría ser miembro de Kingsman, confirmando que todas las películas de espías de Vaughn comparten universo (¿podemos bautizarlo ya como el Matthew Vaughn Cinematic Universe?). 

Sin embargo, esta teoría provoca confusión y deja muchos cabos sueltos. Si la saga Kingsman y Argylle comparten mundo, ¿por qué Samuel L. Jackson y Sofia Boutella interpretan a personajes diferentes en la primera de Kingsman y esta última película? ¿Y si la precuela anunciada hace referencia al primer libro de la Elly Conway real y no la de Howard?

A falta de saber cómo justifica Vaughn este embrollo, se nos ocurren dos explicaciones. La primera, que todo sea una invención de Conway. La autora ha podido escribir las historias de Kingsman y Argylle, dando a sus personajes el físico de gente que forma parte de su vida. En cuanto a la segunda, ¿será que Elly es miembro de Kingsman? Aunque, al ser norteamericana, tendría más sentido que perteneciera a los Statesman de Kingsman: El círculo de oro (2017).

Tocará armarse de paciencia y esperar a ver cómo continua su historia en pantalla. Recordemos que Vaughn aseguró hace unos meses que, tras una secuela que despertó reacciones tibias y una precuela vapuleada, estaba trabajando en la tercera entrega de Kingsman, que recuperaría las andanzas de Taron Egerton como Eggsy. 

Ahora que, de algún modo, Aubrey Argylle comparte universo con los espías mejor vestidos de Reino Unido, no sería descabellado que viéramos a Cavill de traje en Kingsman 3. Recuerda, Henry, los modales hacen al hombre.

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