La marca Mini ha dado forma “física” a su propuesta de monovolumen de futuro, un prototipo que solo se había presentado de forma digital. En este modelo de 4,4 metros de longitud, totalmente eléctrico, Mini propone tres conceptos sobre un mismo vehículo: Wanderlust (coche convencional), Chill (salón para relajarse) y Vibe (discoteca móvil con luces y sonido). Está fabricado con materiales reciclables y está preparado para la conducción autónoma.