¿Sueñas con pasar unos días en un lugar con encanto, naturaleza y mucha historia, pero sin tener que coger un avión y desplazarte fuera de España? A menos de 2 horas de Valencia se encuentra Peñíscola, un pueblo costero con lugares fascinantes, que podrás disfrutar mientras recorres su casco antiguo o te relajas en alguna de sus terracitas frente al mar. Descubrirás que este pueblo de la provincia de Castellón poco o nada tiene que envidiar a Dubrovnik, uno de los destinos europeos que en los últimos años se ha puesto rabiosamente de moda.
¿Qué tienen en común Dubrovnik y Peñíscola?
Uno de los principales atractivos de Peñíscola es el Castillo del Papa Luna. De principios del siglo XIV, se encuentra magníficamente conservado y fue elegido como escenario de la serie Juego de Tronos, al igual que sucede con la ciudad amurallada y otros monumentos importantes de Dubrovnik. Esta fortaleza templaría es una de las principales atracciones turísticas de la zona, y un lugar de parada obligatoria para los amantes de la historia y los monumenos medievales. Está en todo lo alto de un peñón frente al mar, formando una de las imágenes más reconocibles de este bonito rincón mediterráneo. Además, desde aquí podrás captar las mejores instantáneas y entenderás porqué Peñíscola forma parte de Los pueblos más bonitos de España.
El casco antiguo
Pero si el Castillo Palacio del Papa Luna es en buena parte responsable de que Peñíscola cada verano sea uno de los lugares más visitados de nuestro país, el encanto de este pueblo pesquero va mucho más allá y se extiende por su casco antiguo amurallado. Descubrir Peñíscola es perderse con calma por sus callejuelas de entramado medieval con casas blancas que miran al mar formando una postal única. Y entre todas las casas, hay una que seguró te sorprenderá: la Casa de las Conchas, que con su peculiar fachada es imposible no pararse ante ella y fotografiarla.
El Bufador
Es uno de los lugares más curiosos. Se trata de un agujero formado de forma natural en la roca que permite el paso de agua de mar creando un sonido muy ruidoso con las olas, sobre todo cuando el mar está bravo. ¡No puedes pasar por esta localidad sin acercarte a verlo!
Otros lugares de interés en Peñíscola
Fenicios, romanos, bizantinos y árabes son algunas de las culturas que por aquí pasaron, y todas fueron dejando su impronta. Un legado que seguro reconocerás a medida que vayas recorriendo sus rincones más importantes. Como el portal de Santa María, que nos introduce en el recinto amurallado de la villa. Al cruzar esta puerta nos encontramos con la Plaza medieval de Santa María, uno de los enclaves con más encanto de la localidad. Otros lugares de interés son el faro, construido en el siglo XIX, que no se puede visitar, pero desde donde tendrás una bonita panorámica del castillo, y la Iglesia barroca Virgen de la Ermitaña (siglo XVIII).
Cuáles son las mejores playas
No solo Dubrovnik está bañada por aguas transparentes y paradisíacas, Peñíscola también cuenta con algunas de las mejores playas de nuestro litoral mediterráneo. Si en su extensa playa Norte podrás bañarte con vistas al casco histórico, en la playa Sur, encontrarás un arenal más tranquilo y resguardado, perfecto para ir con niños. Y por supuesto, también están las pequeñas calas, algunas escondidas entre las rocas, como la cala Badum. Y al sur de Peñíscola, en la carretera del Parque Natural de la Serra de Irta, podrás disfrutar de dos paraísos de arena dorada y aguas cristalinas: la Playa del Pebret y la del Russo.
¿Cómo llegar a Peñíscola?
Peñíscola se encuentra a 148 kilómetros de Valencia. Si vas en coche, tienes que coger la AP-7, en un trayecto que dura menos de 2 horas.
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