Los cinco destinos más bonitos para adelantar la magia de la Navidad

Rovaniemi, el pueblo de Santa Claus; Nueva York y el tradicional árbol del Rockefeller Center; los mercadillos de Budapest, o las impresionantes luces de Londres o Viena. Descubre el encanto navideño más allá de España. 
Plaza Central de Santa Claus Village en Rovaniemi, Laponia, Finlandia
Plaza Central de Santa Claus Village en Rovaniemi, Laponia, Finlandia
Visit Rovaniemi
Plaza Central de Santa Claus Village en Rovaniemi, Laponia, Finlandia

La época navideña es bonita, no importa el destino. En España, Vigo es conocida por su impresionante despliegue luminoso. Este año, la ciudad gallega encenderá casi 12 millones de leds en 450 calles. Pero no solo el norte destaca dentro del mapa navideño español, en el sur, en Málaga, la calle Larios concentra toda la atención con un espectáculo de luces y villancicos. También Madrid o Barcelona celebran su particular cuento de Navidad con sus mercadillos, espectáculos de luces, conciertos, pistas de patinaje sobre hielo y sus tradicionales cabalgatas de Reyes. 

Destinos para disfrutar de la magia de la Navidad

Pero más allá de nuestra frontera, si tenemos que destacar un lugar especial donde la magia de la Navidad se palpa es en Laponia, Finlandia, en concreto, en el pueblo de Rovaniemi. Un destino que te permitirá conocer la casa de Santa Claus, sus renos, duendes, montar en trineos o disfrutar de las auroras boreales. Un sueño para niños y mayores. Aunque hablando de sueños, si tu época favorita del año es la Navidad, también puedes visitar otras ciudades como Nueva York, Londres, Budapest o Viena, donde dejarte envolver de su fantasía. 

1. Rovaniemi, el pueblo de Santa Claus en Laponia

Familia camina por el Pueblo de Papá Noel en Rovaniemi
Familia de visita por el Pueblo de Papá Noel en Rovaniemi
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Finlandia es el paraíso de los que aman la Navidad. En concreto, el cuento navideño discurre en Laponia donde todos sus pueblos están iluminados con luces de Navidad. Sobre todo, Rovaniemi el famoso pueblo de Santa Claus, un lugar de película en el que niños y mayores pueden disfrutar de infinidad de actividades: 

  1. Visitar a Papá Noel: Si lo deseas puedes visitar su casa y entrar en su oficina, donde nos recibirán unos duendes que nos conducirán por túneles y salas mágicas a un salón donde espera Santa Claus.
  2. Acudir a la oficina de Correos de Papá Noel: Aquí se puede escribir postales y cartas que unas elfas estamparán con un matasellos del Círculo Polar.
  3. Visitar los renos de Papá Noel: En la aldea de Papá Noel viven sus renos, que se pueden visitar y darles de comer. 

2. Un encuentro con los Reyes Magos en el desierto

Durante seis día vivirás la magia del desierto de Marruecos hasta la mágica noche de Reyes.
Durante seis día vivirás la magia del desierto de Marruecos hasta la mágica noche de Reyes.
Azul Bereber.

Otra experiencia mágica navideña es encontrarse con sus majestades los Reyes Magos en el desierto de Marruecos. Una cita inolvidable sobre todo para los pequeños de la casa. Se trata de una experiencia de 5 noches y 6 días en la que se disfruta tanto de Marrakech y de uno de sus riad más exclusivos, como de una ruta privada en busca de los Reyes Magos desde la ciudad hasta el desierto. Una de las noches se disfrutará de la experiencia de dormir en una haima privada en un campamento de lujo en el desierto del Sahara.

3. Nueva York y su Navidad de película

Si hablamos de Navidad, la decoración de Nueva York es difícil de superar. El abeto que se levanta cada año en el Rockefeller Center es probablemente el árbol de Navidad más famoso del mundo. Con una altura de entre veinte y treinta metros, es uno de los espectáculos anuales más conocidos de la Gran Manzana. La decoración y encendido del árbol son una tradición que se remonta a 1933. Más de ocho kilómetros de luces y una estrella de tres metros de altura hecha de cristales Swarovski hacen de este árbol uno de los más bonitos del mundo.
El tradicional y más famoso árbol de Navidad del mundo se sitúa en el Rockefeller Center, de Nueva York.
Civitatis

No podemos hablar de Navidad sin que nos venga a la mente la decoración de Nueva York. Fue en 1933, la primera vez que la ciudad estadounidense se iluminó con miles de luces y diseños de colores, además del encendido del árbol situado en el Rockefeller Center (uno de los abetos más icónicos del mundo), decorado por más de ocho kilómetros de luces y una estrella de tres metros de altura elaborada de cristales Swarovski. 

Pero eso no es todo, Nueva York se convierte en un escenario mágico repleto de actividades navideñas como pistas de patinajes (The Rockefeller Center, la más famosa; The Rink at Bryant Park y Wollman Rink, en Central Park); los mercadillos navideños (Winter Village, en Bryant Park; Grand Central Holiday Fair; Columbus Circle Holiday Market y el Brooklyn Borough Hall Market) o diferentes encendidos de luces.

3. El encanto del Londres navideño

Temporada. La pista de hielo del Kew Botanical Gardens de Londres, abierta al público el pasado fin de semana para la temporada de Navidad.
La pista de hielo del Kew Botanical Gardens de Londres, un clásico en Navidad.
Toby Melville / Reuters

Las semanas antes de Navidad es cuando más se puede disfrutar del alumbrado y decoración navideña, en Londres, ya que la ciudad está mucho menos masificada. Desde noviembre empiezan a abrir las pistas de patinaje sobre hielo; la gran feria de Navidad 'Winter Wonderland', en Hyde Park; los mercadillos de Navidad, y los musicales navideños, como el famoso ballet 'El cascanueces'.

No podemos hablar de la navidad londinense sin mencionar la decoración de los escaparates de las tiendas del centro, como en las calles Oxford Street, Regent Street, Piccadilly Street y Bond Street, sin olvidar los grandes almacenes Harrods. 

4. El mercadillo navideño de Budapest

Mercadillo navideño en Budapest.
Mercadillo navideño en Budapest.
Getty Images/iStockphoto

Estamos ante un icono navideño. El mercadillo de Budapest Advent Bazilika ha sido nombrado Mejor mercadillo navideño de Europa 2023, título que ya ostentó en 2020 y 2022. Abanderado por el eslogan 'Donde el amor te lleva de la mano', este mercadillo de Navidad, ubicado frente a la Basílica de San Esteban, está compuesto por cerca de 120 puestos de artesanía local y deliciosos productos gastronómicos típicos del país, como el strudel. Además, un árbol de Navidad de doce metros acapara parte de un protagonismo que comparte con una pista de patinaje sobre hielo.

Si prefieres no pasar por turista, visita el mercadillo favorito de los locales, el Óbuda Advent. Este tiene lugar en la plaza Fő, la plaza central de Óbuda, al norte de la capital. La feria ofrece una pista de patinaje, espectáculos en vivo y un mercado artesanal.

5. La Viena encantada

Ayuntamiento de Viena iluminado en Navidad.
Ayuntamiento de Viena iluminado en Navidad.
Getty Images/iStockphoto

Viena es otra de las ciudades europeas que merece la pena visitar durante la época navideña. Desde mediados de noviembre sus calles y plazas se convierten en un universo de magia, luz y bonitas casas de madera. 

Una de las paradas imprescindibles es el mercadillo Vienna Magic of Advent, situado en la Plaza del Ayuntamiento. Formado por unas 150 puestos con forma de casitas de madera, aquí podrás adquirir adornos para el árbol de Navidad, dulces, ponche caliente, platos típicos, un carrusel y diferentes talleres para niños. Otro punto icónico se sitúa frente al Palacio de Schönbrunn, que después de Navidad se convierte en un mercado de Año Nuevo y ofrece artesanía, joyas artesanas, conciertos navideños 

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