España cuenta con numerosos paraísos termales que, por su belleza y por estar situados en entornos privilegiados, merecen una visita en cualquier momento del año. Y no lo vamos a negar, también de paso para cuidarnos un poco. Si eres de los que a pesar del frío no renuncian a darse un baño calentito en medio de la naturaleza, en el pueblo de Alhama de Aragón podrás darte este placer asegurado. Pero además de aguas mineromedicinales, en este pueblo aragonés que está bañado por el río Jalón, encontrarás un paisaje espectacular y mucha tranquilidad.
El mayor lago termal de Europa
Situado en la ruta entre Madrid y Zaragoza, este edén de la desconexión invita a hacer una parada para disfrutar de los beneficios de las aguas termales. Unas aguas que, por sus magníficas propiedades, han puesto a Alhama de Aragón en el punto de mira del mundo entero. Con sus más de dos hectáreas, dos islas y una temperatura que oscila entre los 28 y los 34 grados, las Termas Pallarés acogen al mayor lago termal de Europa y al único que hay en España. Nada más entrar en los jardines del balneario te sentirás transportado al glamour de siglos pasados.
Además de nadar en el lago que está rodeado de árboles centenarios, podrás disfrutar de la zona de los manantiales y beneficiarte de las propiedades de los chorros terapéuticos de agua, así como adentrarte en la zona de las burbujas, si lo que buscas es dar descanso a las piernas. También hay un espacio de fangos termales donde meter los pies.
Qué ver en Alhama de Aragón
Además de descansar, resetear la mente y aliviar dolencias, encontrarás un pueblo con encanto. Recorriendo sus calles reconocerás las huellas del dominio musulmán, lo que también se refleja en su nombre, ya que Alhama de Aragón, es una derivación del árabe Al-Hammam (el baño) término referido a sus aguas termales.
Entre los edificios más destacados están la Casa Palacio, de construcción típica aragonesa (siglo XVI), el Palacio de los Padilla o la iglesia de la Natividad de Nuestra Señora, con su torre de estilo mudéjar. Pero también el castillo de Alhama de Aragón, de origen musulmán, que se alza sobre el cerro de la Serratilla, a las afueras de la población, y del que solo queda la Torre-castillo de los Señores. Por cierto que el lago no es el único lugar donde se pueden encontrar aguas termales: al pie de la torre del castillo está la fuente del Chorrillo, un caño de agua que también cuenta con propiedades terapéuticas.
Cómo llegar a Alhama de Aragón
Se encuentra a poco más de 200 kilómetros de Madrid, y a menos de 2 horas de viaje. Tienes que coger la A-2 y tomar la salida 204 hacia N-II, indicación: Contamina/Alhama de Aragón.
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