Hay un reactor de fusión en EEUU que se mantiene unido con cinta adhesiva

La startup usó una cinta adhesiva superconductora de alta temperatura y la enrolló para emplearla para su reactor.
La startup usó una cinta adhesiva superconductora de alta temperatura y la enrolló para emplearla para su reactor.
Gretchen ERTL/CFS/MIT Plasma science and fusion center
La startup usó una cinta adhesiva superconductora de alta temperatura y la enrolló para emplearla para su reactor.

Un reactor de fusión que se ubicará en unos meses en el sótano de una antigua base de Reserva del Ejército de EEUU, en Boston, cuenta con una peculiaridad: se mantendrá unido gracias a una cinta adhesiva. Brandon Sorbom, director científico de Commonwalth Fusion Systems (CFS) explica en IEEE Spectrum que se trata de una cámara de vacío en forma de circunferencia en la que se colocará una pila de 3 metros de altura de imanes superconductores de alta temperatura que generará un campo magnético capaz de imitar el proceso que alimenta al Sol.

CFS es una startup tecnológica que surgió a través del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) y que lleva años de investigación e ideando proyectos de energía de fusión. Este combustible es más beneficioso para el medo ambiente que otros que se utilizan actualmente y Sorbom comenta que esperan "poder hacerlo a tiempo [su reactor] para ser una parte importante de la solución a la crisis climática".

La cinta que usarán es de óxido de cobre y bario de itrio, que los investigadores han comprobado que podría soportar el golpeteo de neutrones rápidos de átomos en fusión. El equipo utilizó una cinta HTS, la cual enrolló en bobinas y podrían usarse para su reactor.

Según informa CFS, los investigadores esperan que su propuesta permita desarrollar un tokamak de alto rendimiento más pequeño y menos caro que los modelos realizados con los métodos actuales, que son dos:

  • El confinamiento magnético: usan electroimanes para confinar el plasma dentro de un tokamak. 
  • El confinamiento inercial: comprime y calienta un objetivo lleno de combustible usando láseres para originar una reacción.

Lo que diferencia la tecnología de CFS de la de otros reactores es el uso de una cinta superconductora de alta temperatura que se superpone y apila para crear electroimanes muy fuertes. Estos podrán dar forma y confinar el plasma y mantendrán la mayoría de las partículas cargadas lejos de las paredes del tokamak.

Los materiales superconductores, por lo general, pueden conducir la electricidad de corriente continua sin resistencia y pérdida de energía si se enfrían por debajo de una temperatura concreta. En cambio, con los imanes superconductores de alta temperatura que usará CFS, se podrá conducir la energía a mayor temperatura (a unos –200 o –250 °C, que aunque siga siendo un ambiente muy frío, es mucho más cálido que lo actual).

"Estos nuevos materiales están permitiendo un nuevo camino hacia la energía de fusión, porque además de sus capacidades superconductoras a temperaturas criogénicas más altas, también pueden ir a campos magnéticos muy altos -asegura Scott Hsu, asesor principal del Departamento de Energía de los Estados Unidos-. Estas propiedades brindan la posibilidad de diseñar sistemas de fusión más pequeños, menos complejos y de menor costo, que son más rápidos de construir y más fáciles de desmontar para el mantenimiento".

Si se consiguen desarrollar tokamaks más pequeños gracias a CFS, se podría dar marcha atrás a la tendencia actual que implica producir máquinas cada vez más grandes para proseguir con el avance de la fusión.

Apúntate a nuestra newsletter y recibe en tu correo las últimas noticias sobre tecnología.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento