Este 5 de septiembre se cumplen 46 años del lanzamiento de la Voyager 1 por parte de la NASA desde el Cabo Cañaveral en 1977. Esta se convirtió en la primera nave en llegar al espacio interestelar en 2012.
Este ingenio espacial, con un peso de 722 kg, tiene la capacidad de diagnosticar y resolver problemas a bordo, y está operativa en la actualidad con su misión de explorar los confines del sistema solar, incluyendo el cinturón de Kuiper y más allá. Así como adentrarse en el espacio interestelar cercano, hasta finalizar su misión.
El 25 de agosto de 2012, la Voyager 1 dejó atrás la heliopausa a una distancia de 122 unidades astronómicas, convirtiéndose en la primera nave en alcanzar el espacio interestelar. Aunque su misión original incluía visitar Júpiter y Saturno, también se convirtió en la primera sonda en proporcionar imágenes detalladas de los satélites de estos planetas.
En la actualidad, se encuentra a una distancia de 161 unidades astronómicas del Sol (unos 24.100 millones de kilómetros), lo que la hace la nave espacial más alejada de la Tierra y la primera en abandonar el Sistema Solar. En diciembre de 2018, fue seguida por su gemela, la Voyager 2, y a pesar de que esta fue lanzada 16 días antes, nunca la superará.
Se estima que la sonda número 1 tardará aproximadamente unos 17.700 años en salir de la nube de Oort, una esfera de objetos transneptunianos situada a casi un año luz del Sol, y se adentrará en ella en unos 300 años.
Tampoco será superada por la misión New Horizons, que se dirige a Plutón y el Cinturón de Kuiper a una velocidad inicial más alta que las dos Voyagers. Esto se debe a que la Voyager 1 aumentó su velocidad debido a tirones gravitacionales asistidos.
Aunque la velocidad actual de New Horizons es mayor que la de la Voyager 1, cuando alcance la misma distancia del Sol a la que se encuentra la Voyager 1, su velocidad será de 13 km/s en comparación con los 17 km/s de la Voyager 1. Esta sigue una trayectoria hiperbólica y ha alcanzado la velocidad de escape, lo que significa que nunca volverá al sistema solar interior.
Ambas sondas Voyager han superado con creces su tiempo de vida estimado. Cada una de ellas obtiene su energía eléctrica de tres generadores termoeléctricos de radioisótopos (RTG), de los cuales se espera que continúen generando suficiente energía para mantener la comunicación con la Tierra al menos hasta el año 2025.
Apúntate a nuestra newsletter y recibe en tu correo las últimas noticias sobre tecnología.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios