Con la llegada del verano, es el momento de lucir unos pies bonitos, sin durezas, sin grietas y sin otros problemas causados por la sequedad. El uso de sandalias, las tardes en la piscina o los días de playa son situaciones para las que conviene tener unos pies hidratados y sanos.
Actualmente, existen en el mercado numerosos productos específicos para el cuidado de los pies, sobre todo, en cuanto cremas hidratantes y refrescantes, que además de acabar con la sequedad, sirven para aliviar los pies del dolor o la pesadez de la tensión soportada después de un duro día.
La sequedad puede producir infecciones
Los pies son una parte fundamental del cuerpo, a pesar de que muchas veces su cuidado se deja de lado. El cuidado de los pies no solo influye en factores estéticos, sino también de salud. De hecho, el problema de sequedad puede producir infecciones en la zona.
La correcta hidratación debe hacerse para prevenir la aparición de grietas en los talones, un problema que puede producir desde picor hasta dolor al caminar, sobre todo, cuando la sequedad de la piel es muy importante.
La piel hidratada es mucho más elástica, algo fundamental para que no aparezcan grietas y descamaciones, dos de los problemas en los pies que pueden producir infección por microorganismos, ya que la piel es la barrera de entrada para retener a los mencionados microorganismos, tal y como indican los expertos en el cuidado de pies de Dr Scholl.
Características de la piel de los pies
Lo más importante a la hora de hidratar los pies es tener en cuenta que el tipo de piel no es la misma que en otras zonas del cuerpo, lo que hace indispensable tener una crema y una rutina específica para esta zona, ya que las cremas o productos usados para otras partes del cuerpo no serán igual de eficaces para los pies.
La piel de los pies se caracteriza por ser mucho más resistente que la de otras partes, sobre todo, porque es la zona que soporta el peso de nuestro cuerpo durante todo el día. También, sufren el roce del calzado.
Así, un dato que hace reflexionar sobre las peculiaridades de la piel del pie es que esta puede llegar a ser 50 veces más gruesa que la de la zona de la mejilla en la cara, concretamente, la zona del talón, tal y como indican desde Podoactiva, expertos en podología.
¿Cuándo se deben hidratar los pies?
Al igual que la piel de la cara o el resto del cuerpo, la piel de los pies también necesita un cuidado diario y una rutina para mantenerlos sanos e hidratados constantemente, algo se deja muy de lado, sobre todo, en los meses de invierno.
El momento ideal para hidratar los pies es a diario, pero siempre por la noche. La piel de otras zonas del cuerpo se suele hidratar por las mañanas o después de la ducha, pero la hidratación de los pies debe llevarse a cabo por la noche, tal y como indican desde Podoactiva.
Esto es debido a que si se hidratan los pies por la mañana y, seguidamente, se mete el pie en el interior de un calcetín y/o zapato, la mezcla entre la hidratación y la posible sudoración del pie puede provocar la aparición de un medio húmedo que no favorece la salud de nuestros pies.
Así, la rutina de hidratación se debe hacer antes de dormir, hidratando los pies y dejándolos al aire durante un rato, favoreciendo la absorción de la crema y manteniéndolos en alto, sin pisar el suelo.
¿Cómo hidratar correctamente los pies?
Antes de ir a dormir, basta con tener una crema hidratante a mano en la mesilla de noche y darle a los pies un pequeño masaje, de tal modo que la crema se absorba y cumpla su función durante la noche.
Se pueden seguir unos pasos específicos para hacer de este proceso una rutina más completa que permita relajarse y dejar los pies perfectos para el día siguiente:
- En primer lugar, se pueden introducir los pies en agua tibia y dejarlos a remojo unos minutos.
- Después, basta con usar la crema específica para los pies, aplicándola de forma uniforme en la planta, los dedos y los talones.
- Masajear con la crema durante unos minutos todas las zonas del pie, para destensar y relajar la zona.
- Por último, se deben dejar al aire, sin ponerse calcetines ni otras prendas, para que termine de absorber sin problema. Tampoco se debe pisar el suelo.
Exfoliación de los pies, otro de los cuidados fundamentales
Al igual que los pies necesitan hidratarse, también necesitan otros cuidados adicionales. Es el caso de la exfoliación, que debe realizarse una o dos veces por semana, más aún en verano, según la marca de calzados de lujo de Miss García.
La exfoliación es fundamental para eliminar las células muertas e impurezas acumuladas sobre la superficie de la piel de los pies, un tratamiento sencillo que puede hacerse en casa con la gran variedad de productos que están ahora disponibles en el mercado.
Comentarios