Comunidad Valenciana

Energía geotérmica para autoabastecer al Museo de las Ciencias de València

El Museo de las Ciencias, junto al lago.
20M EP

El Museo de las Ciencias contará con la planta geotérmica más grande de la Comunitat Valenciana que, según indican desde la Ciudad de las Ciencias, mejorará la eficiencia energética de la climatización del edificio al conseguir un ahorro anual estimado de 1.013.000 de kWh de la energía utilizada actualmente y un ahorro de emisiones de CO2 de 335.000 kg/año, así como la reducción de la huella de carbono del complejo. Esta es una de las actuaciones incluidas en los proyectos de sostenibilidad ambiental que está impulsando el recinto cultural y científico,  que también contempla la instalación de paneles solares en los voladizos exteriores del propio Museo y soluciones de arquitectura bioclimática.

Tras la presentación de propuestas, Cacsa está valorando las diferentes opciones para la contratación de las obras de mejora energética del Museo y que están vinculadas al Programa de Impulso a la Rehabilitación de Edificios Públicos (PIREP) publicada en el Diario Oficial de la Unión Europea (2022/S 103-287741) y en la Plataforma de Contratación del Sector Público, el 30 de mayo de 2022.

Con la ejecución de estas intervenciones se conseguirá reducir un 30% del consumo energía primaria no renovable del Museo de las Ciencias, que es también uno de los requisitos exigidos por el PIREP, lo que supondrá también un ahorro en el gasto energético del edificio.

Esta tecnología se encuentra ya implantada a menor escala en algunos edificios públicos de la ciudad de València, como la Ciudad administrativa Nou d’Octubre y el Complejo Deportivo de La Petxina. La del Museo será la planta de mayor envergadura de la Comunitat Valenciana, con una potencia térmica instalada de 4.050 kW térmicos, prácticamente 10 veces superior a la de las instalaciones mencionadas.

La planta de geotermia conectará las sala de máquinas del Museu de les Ciències con los acuíferos naturales del terreno, mediante un circuito de tuberías que recircularán el agua utilizada para la climatización del edificio. Esta agua absorbe en verano el calor sobrante que producen las máquinas de climatización y lo traspasa al agua existente en el subsuelo, que se encuentra todo el año a la misma temperatura, sobre los 20ºC, devolviendo al Museo el agua enfriada. En invierno se conseguirá el efecto contrario, ya que el agua adquirirá temperatura del subsuelo para traspasar el calor a la instalación de climatización.

Para ello se ha proyectado una red de 45 pozos de pequeño diámetro (sobre los 30 centímetros) en los terrenos adyacentes al Museo, que llevarán las tuberías hasta la profundidad en la que se encuentre el agua a temperatura constante. Al tratarse de una energía renovable, la geotermia es una tecnología limpia, dado que no se produce ningún vertido al terreno y solo se intercambia el calor a través del contacto de las tuberías con el agua del subsuelo, con lo que funciona como un circuito cerrado.

Placas solares en el exterior

La Ciudad de las Artes y las Ciencias se encuentra inmersa en la mejora de su eficiencia energética para convertirse en edificio verde. El Museo también se abastecerá de energía solar con la instalación de las placas de pavimento fotovoltaico de vidrio en los voladizos exteriores. Asimismo, se disipará el calor producido por la instalación a través de la planta geotérmica y se renovará el aire del interior con exceso de temperatura mediante corrientes naturales.