Aunque parezca una novedad, la cerveza de jengibre lleva consumiéndose durante cientos de años y, de hecho, algunas de las bebidas más populares utilizan esta receta. Pero, ¿cuál es su historia? ¿Por qué está compuesta? La popular cerveza hecha a base de jengibre o ginger beer se remonta al siglo XVIII en Inglaterra, desde donde se extendió a otros lugares del planeta como Canadá o Estados Unidos.
De esta manera, su origen es bastante peculiar y se hizo mezclando los siguientes ingredientes: jengibre, agua azucarada y limón opcional o crema tártara. Sin embargo, "aunque el nombre es engañoso, en realidad nunca fue una cerveza, sino que los métodos de producción fueron similares", explican en OliKo Ginger Beer.
¿Cómo se prepara esta particular cerveza?
Se trata de una bebida carbonatada cuyo ingrediente principal es la raíz de jengibre y se endulza con azúcar o algún tipo de edulcorante. En este sentido, el grado de alcohol varía en función de su fabricación, pero si se sigue la elaboración tradicional puede alcanzar hasta el 11%. Sin embargo, la mayoría de cervezas que se comercializan suelen contener un menor porcentaje de alcohol.
A diferencia del ginger ale, que es un refresco aromatizado con un extracto de esta planta, la ginger beer es "una bebida fermentada más seca que contiene auténtica raíz de jengibre y probióticos", añaden desde OliKo.
En este sentido, la receta tradicional incluye únicamente jengibre, agua y azúcar. A esta mezcla se añade una sustancia conocida como planta de cerveza de jengibre, que es principalmente una levadura y una bacteria beneficiosa para la regulación intestinal.
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